A la espera del sorteo

lAS 140 viviendas de protección oficial en régimen de alquiler que la sociedad pública del Gobierno Vasco, Visesa, gestiona detrás del hospital comarcal ya están listas. En estas últimas semanas los técnicos han realizado las preceptivas labores de inspección para dar oficialmente por concluida la obra de la penúltima promoción de VPO prevista en los terrenos de la antigua Cerrajera, en Arrasate.

Distribuidos en tres bloques, los 140 pisos de arrendamiento aguardan el desembarco de sus futuros inquilinos, aunque la llegada de estos todavía tendrá que esperar. Etxebide se encargará de coordinar el sorteo que, según las últimas previsiones, "se celebrará entre finales de este año y principios de 2014". La fecha exacta no obstante, se dará a conocer el próximo mes de mayo cuando el Servicio Vasco de Vivienda concrete el calendario de los sorteos.

Los precios máximos de la renta anual de las citadas VPO se calcularán en función de los ingresos máximos de los arrendatarios y del precio máximo de venta vigente cuando se presenten los contratos de alquiler para ser suscritos.

La citada promoción, que antes de su puesta en marcha estuvo bastante tiempo a la espera de ser ejecutada, está constituida por 90 inmuebles de dos habitaciones, de entre 60 y 65 metros cuadrados; 36 pisos de tres dormitorios y 75 m2, y 14 más de una sola habitación y una superficie de entre 45 y 50 m2. Todos ellos incluyen una plaza de garaje y trastero. Las obras realizadas por Sukia Eraikuntzak arrancaron en el segundo trimestre de 2011 con una inversión de 9,1 millones de euros.

Para poner punto final a la operación residencial de la Cerrajera, el mayor parque de VPO de Arrasate, Visesa tiene pendiente una última promoción de 216 viviendas, en la parcela contigua a las 140 VPO recién terminadas, que el Consistorio arrasatearra también reserva para alquiler social. Este solar hoy en día está convertido en un gran foso repleto de agua, que ha crecido aún más con las copiosas lluvias de las últimas semanas. El proyecto de construcción, sin embargo, sigue sin mover ficha, máxime cuando en la situación económica actual "resulta difícil poner un plazo para el inicio de las obras", señalan desde Visesa.