Donostia. Los grupos del PSE-EE y el PP en el Ayuntamiento acusaron ayer al Gobierno Vasco de "castigar" a Donostia después de que la consejera de Política Territorial, Ana Oregi, descartara el miércoles el proyecto ya adjudicado para llevar la línea del Topo por La Concha y Ondarreta, en el marco del proyecto bautizado como Metro de Donostialdea. La consejera argumentó que es "imposible" abordar la obra en el "actual escenario presupuestario", aunque el PSE-EE acusó a la consejera de "no utilizar las cifras reales" y de buscar "excusas" para "esconder en un cajón" el proyecto. Por su parte, el portavoz del PNV en el Consistorio, Eneko Goia, insistió en que va a seguir "defendiendo el Metro de Donostialdea, en sentido amplio", al tiempo que el concejal de Movilidad, Jon Albizu, mostró la satisfacción del Gobierno municipal de Bildu porque "la pasante ferroviaria por el Centro no es una prioridad".

Tras las declaraciones de Oregi, tanto el PSE-EE como el PP pidieron ayer a la consejera que comparezca en el Consistorio, en la comisión creada para supervisar estas obras, para dar explicaciones sobre la decisión de no iniciar los trabajos. Para ambos grupos, la falta de presupuesto es una excusa y el portavoz del PSE-EE en Donostia y exviceconsejero de Transportes, Ernesto Gasco, acusó a Oregi de manipular las cifras cuando afirmó que solo están comprometidos 90 de los 180 millones que costaría la pasante ferroviaria: "Si se han adjudicado los proyectos es porque ya hay créditos de compromiso para financiar las obras hasta 2016, como indica la ley. Hay 110 millones comprometidos en el Gobierno Vasco y 40 más en ETS para ese proyecto".

Asimismo, Gasco defendió que la rentabilidad social del desvío del Topo por Ondarreta y La Concha, con una previsión de 23 millones de viajeros al año, es mucho mayor que la de las líneas 3, 4 y 5 del Metro de Bilbao. Concretamente, según los datos ofrecidos por el portavoz socialista, la intervención en Donostia costaría 7,83 euros por pasajero, mientras que la línea 3 de la capital vizcaina (con un coste total de 254 millones de euros) supondría una inversión de 56,44 euros por viajero. Por todo ello, anunció que presentarán una declaración institucional en el próximo Pleno para que el Ayuntamiento donostiarra se reafirme en un texto que ya aprobó en 2011 (con los votos de PSE-EE, PP y PNV) a favor de esta obra. "Estamos indignados y muy enfadados y nos parece impresentable que se castigue siempre a Donostia y Gipuzkoa; es una irresponsabilidad", añadió Gasco.

"que dé explicaciones" En esa misma línea reaccionó el PP. "¿Se van a parar la línea 3 del Metro o la ampliación del puerto en Bilbao? No, ¿verdad?", declaró el portavoz popular, Ramón Gómez, que consideró que Donostia "no se merece esa actitud permanente del Gobierno Vasco hacia la ciudad". Por ello el PP se sumó a la petición para que Oregi comparezca en el Consistorio y "dé la cara" y "dé a los donostiarras las explicaciones que trató de dar en el Parlamento y que no convencieron".

"seguiremos defendiéndolo" Por su parte, Goia declaró que el PNV va a "seguir defendiendo el Metro de Donostialdea como instrumento de transporte público y eficaz que pueda dar respuesta y servicio a la metropoli donostiarra". No descartó, de todos modos, que el Ejecutivo de Vitoria esté barajando una alternativa al proyecto, aunque incidió en que si la decisión de descartar el plan está justificada, su grupo "la respetará".

Goia sí que anunció que, de todos modos, exigirán al Gobierno Vasco que trabaje para unir las dos líneas de EuskoTren que confluyen en la ciudad "de la mejor manera posible" para "dar una solución" así a la situación actual.

"no era prioritario" Por su parte, Bildu mostró su "satisfacción" por la decisión de Oregi. "Hace tiempo que el Gobierno municipal de Donostia había planteado que la pasante ferroviaria que planteaba el anterior Gobierno Vasco no era una prioridad para el transporte público", declaró Albizu. El edil añadió que sí consideran necesarias otras intervenciones en la línea del Topo a su paso por Donostia, como el intercambiador de Riberas de Loiola que conecte EuskoTren con el servicio de Cercanías de Renfe, la nueva estación de Altza y su conexión con Pasaia y continuar con el desdoblamiento de la línea del Topo para poder mejorar las frecuencias y la velocidad de los trenes. "Esperamos poder trabajar con el nuevo Gobierno Vasco para poder desarrollar e impulsar estos proyectos que sí creemos que son estratégicos", añadió Albizu.