Cultura para fomentar el comercio
Donostia estrena una prueba piloto en la que se utilizan locales vacíos para actividades culturales
hABITUALMENTE, la cultura no suele ir de la mano del comercio. No obstante, con un poco de originalidad y si se es emprendedor, todo se puede conseguir. Es el caso de un grupo de jóvenes que ayer y anteayer llevaron a cabo la prueba piloto de un innovador proyecto en las calles de Donostia. Dos locales vacíos en los números 7 y 8 de la calle San Marcial han acogido durante esos días exposiciones, conciertos, talleres para adultos y niños y obras de teatro, entre otras actividades.
Los donostiarras que han pasado por esta vía han asistido a algo que nos se ve todos los días: la iniciativa llamada Shopping Spaces, que tiene como objetivo fomentar el comercio a través de la cultura. Detrás de este proyecto se encuentran ocho exalumnos de la escuela de diseño Kunsthal -Nagore Gorrotxategi, Andrea Rios, Ane Bilbao, Laura Martin, Natalia Salaberria, Deñe Izaga, Nerea Fagoaga, Julen Diez e Iñaki Benito-; además de dos profesores de la escuela -Gaizka Zuazo y Jesús Arrekubieta-.
Uno de los miembros del grupo, Iñaki Benito, explica la génesis de la iniciativa. "Kunsthal sacó una especie de bolsa de trabajo para alumnos que habían concluido sus estudios", asegura. La escuela de diseño pedía la realización de una serie de proyectos que, a su vez, eran demandados por entidades que se basaban en necesidades que habían percibido ciertas instituciones. Entre ellas, la Cámara de Comercio vio la necesidad de llevar a cabo un proyecto que fomentase el comercio de Donostia. Los ocho componentes se pusieron manos a la obra.
"Cuando comenzamos a plantear distintas ideas para afrontar el proyecto, surgió la de fomentar el comercio mediante la cultura. Y qué mejor para hacerlo que la cultura local", expone Benito.
Y así ha sido. Los distintos colectivos o personas que han participado animando la calle San Marcial durante estos días han sido grupos emergentes del tejido asociativo de la ciudad. Benito señala que no buscaban a "grandes artistas" sino a "noveles". "En el caso de artistas musicales, por ejemplo, se les puede dar una oportunidad. Es gente que está empezando. Y lo mismo a dibujantes, pintores, grupos teatrales... Tras contactar con ellos, buscamos unos locales que estuviesen sin utilizar, en alquiler o en venta", añade.
El proyecto Shopping Spaces se basa en que durante el tiempo en el que esos locales se encuentren sin uso se puedan utilizar para llevar a cabo varios eventos y actividades que generen "ambiente en las calles". "Nosotros pedimos que nos cedan el local y organizamos la actividad. Pero no queremos que los actos se creen únicamente dentro del local, sino que se den hacía fuera, mediante la utilización del escaparate", apunta el joven, al tiempo que añade que esto permite que "los comercios de alrededor se vean beneficiados".
Benito subraya que las personas y colectivos que han colaborado con la iniciativa, así como ellos mismos, como organizadores, lo han hecho sin "ánimo de lucro", sin cobrar nada.
En este sentido, indica que el beneficio que Shopping Spaces puede traer a estos colaboradores es el de que expongan su arte al público, y de esta forma conseguir "visibilidad". "Ellos nos hacen un favor y nosotros a ellos también", asegura.
Entre los que han participado en la iniciativa, por ejemplo, ha habido artistas musicales "que no son profesionales" y gracias a este proyecto han conseguido "mostrarse" a los donostiarras. Lo mismo ocurre con otras actividades, como el teatro, en el que han participado estudiantes del grupo de teatro de Jareño, en Egia.
actividades
Colaboración
Además de partir de una iniciativa de la Cámara de Comercio, los promotores de Shopping Spaces también han contado con el apoyo de Sshops Donostia para la "prueba piloto". Precisamente, han colaborado con la iniciativa Shopping Jazz Night, que "organiza eventos relacionados con el Jazzaldia en locales comerciales". Fruto de esta colaboración el jueves tuvo lugar una exposición de carteles antiguos del Festival de Jazz de Donostia y, posteriormente, tuvo lugar un concierto.
En cuanto a la elección del lugar, los organizadores de Shopping Spaces contactaron con una inmobiliaria a la que le gustó la iniciativa. A través de esta, se relacionaron con el dueño de los dos locales de la calle San Marcial, "que llevaban tiempo sin uso". "Al propietario también le gustó la idea", asevera Benito, que añade que esta iniciativa permite darle "publicidad al local".
Unos consiguen visibilidad, otros llevar a cabo un proyecto interesante. La juventud, el arte local y el desarrollo económico no son cuestiones que se mezclen todos los días y cuando se reúnen en un original proyecto, el talento sale a relucir y el resultado puede ser perfecto.