En una rueda de prensa, Vitoria, acompañado de Josu Ruiz, edil y portavoz del Consistorio, ha recordado que, "por responsabilidad", el Gobierno municipal de Bildu de "bloquear el crédito y por lo tanto, no realizar gasto en inversión, mientras las arcas no registren ingresos".
Además, ha destacado que "cueste lo que cueste a nivel político", el Gobierno municipal va a "asegurar el equilibrio del presupuesto corriente" y tratará de "evitar actuaciones especulativas que lleven a un endeudamiento que luego se tenga que corregir tirando de gasto social".
"Estamos inmersos en una recesión larga, y como nos recomiendan los economistas y los interventores del Ayuntamiento, en una situación de ese tipo lo menos recomendable es endeudarse, porque una deuda dilatada va ahogando poco a poco porque va apretando cada vez más", ha apuntado.
En este contexto, ha apuntado que el "margen de error es pequeño" y, por ello, no darán "un solo paso en falso". "Tenemos claro nuestro orden de prioridades, las necesidades básicas de las personas están por delante del ladrillo y de las grandes infraestructuras, que en algunos casos, pueden tener una dudosa rentabilidad social", ha indicado.
Tras apuntar que están estudiando "cada actuación en profundidad", ha afirmado que se ha reunido ya con directores de algunos departamentos, como anunció, para ver "cómo se puede ajustar el gasto corriente y qué gastos de capital se pueden bloquear".
Además, ha advertido del previsible descenso en la recaudación del territorio y su efecto sobre el Fondo Foral de Financiación Municipal (FOFIM) que puede hacer que el Ayuntamiento tenga que devolver "alrededor de 11 millones de euros a la Diputación a lo largo del año 2012", lo que "obliga a revisar los gastos corrientes en lo que queda de ejercicio, ya que el gasto está presupuestado sobre una expectativa de ingreso que ahora nos dicen que va a ser considerablemente menor".
En este sentido, ha señalado dos opciones para mantener el equilibrio del gasto corriente en el ejercicio que viene, "o bajar el gasto corriente, como ya se está estudiando con los directores de los departamentos, o se subir las tasas, o ambos". "Tenemos varias semanas por delante para decidirlo", ha añadido.
Vitoria ha asegurado que tratarán de "consensuar" la decisión con los grupos de la oposición y ha esperado que los mismos "obren con responsbilidad". Por otro lado, ha recordado que el Ayuntamiento recibe una cantidad de la
Diputación para su financiación sobre la base de una previsión recaudatoria y pasado el ejercicio, y una vez conocida la recaudación efectiva, la diferencia que pudiera haber se liquida a o en contra del Consistorio.
A su juicio, es necesario "modificar el sistema de financiación a las entidades locales, ya que el actual no asegura su autonomía financiera y proporciona incertidumbre en su funcionamiento". Vitoria ha criticado "la falta de prudencia en las previsiones forales, y la irresponsabilidad que supone dotar a las arcas municipales de unas expectativas de gasto que no corresponden con la realidad".