ZUMARRAGA es una localidad con larga tradición musical. Su banda tiene casi 150 años y algunos de sus más ilustres vecinos son músicos. Entre ellos están Ignacio Busca Sagastizabal y Secundino Esnaola. Los dos cuentan con sendas calles en la localidad y el primero fue objeto de un homenaje a finales de 2009. Ahora le toca el turno a Secundino Esnaola: el religioso, director de agrupaciones corales y compositor José Luis Ansorena ofrecerá hoy una conferencia en la casa de cultura Zelai Arizti. El acto dará comienzo a las 19.30 horas y servirá para que los zumarragarras conozcan mejor la obra de este músico y compositor zumarragarra.

aportación

Abrió la puerta a las mujeres

Secundino Esnaola Berrondo nació en Zumarraga el 21 de mayo de 1878 y falleció en Donostia el 22 de octubre de 1929. El sábado se cumplirán, por lo tanto, 133 años de su nacimiento. Su primer contacto con la música tuvo lugar en la iglesia parroquial de Santa María de la Asunción. Otro gran músico zumarragarra, Juan Lino de Leturia, fue su primer mentor. Con él aprendió las primeras nociones de solfeo y pronto mostró inclinación por el canto.

Su potente voz causó admiración en Bergara, donde fue seminarista. Después se trasladó al Seminario Conciliar de Salamanca, donde su inclinación por el mundo vocal le llevó a formar y dirigir un coro con sus compañeros.

Con 21 años dejó el seminario y volvió a Donostia. Dirigió al coro en la Iglesia Parroquial de San Vicente. También impartió clases de solfeo y canto y cursó estudios de armonía con Bonifacio Etxeberria y de contrapunto y fuga con Julio Valdés.

En 1902, a la muerte de Norberto Luzuriaga Luxu, fue nombrado director del Orfeón Donostiarra. Al poco la agrupación coral ganó el Concurso Internacional de Orfeones de Royan. Esnaola inyectó savia nueva al Orfeón, permitiendo la admisión de mujeres y niños. Para ello tuvo que enfrentarse a las protestas de los detractores.

Siendo ya un gran director de reconocido prestigio, continuó estudiando para ser maestro de canto. También compuso pequeñas obras religiosas. El Gobierno francés le distinguió con el título de Officier de l'Instruction Publique. Acreedor de honores, como las Palmas Académicas Francesas y la Cruz de Alfonso XII, Zumarraga le nombró hijo predilecto el 3 de julio de 1927. Para entonces llevaba ya 25 años dirigiendo el Orfeón. Aquel día los doscientos componentes del Orfeón Donostiarra ofrecieron un recital en la iglesia. La agrupación coral actuó también en el frontón, tras la celebración de un gran homenaje en el ayuntamiento.

Tal y como se ha indicado, el músico y compositor Secundino Esnaola falleció en Donostia en 1929. Su funeral se convirtió en una muestra grandiosa de dolor y reconocimiento popular. La capital le dio su nombre a una calle del barrio de Gros y a una plaza adyacente como muestra de agradecimiento. Una de las principales calles de Zumarraga también se llama Secundino Esnaola. Además, en los arcos del ayuntamiento se puede ver una placa en su memoria y la escuela de música de Urretxu y Zumarraga lleva su nombre con orgullo.