DONOSTIA. El Ayuntamiento de Donostia reclama casi un millón de euros para revender a su dueño original 32.000 metros cuadrados de terreno en Ametzagaina, que fueron expropiados en los años 70 para construir un nuevo cementerio. La cifra duplica el precio fijado por el Jurado Territorial de Expropiación Forzosa, que consideró, en noviembre del año pasado, que el precio de los terrenos era de 390.000 euros. El Ayuntamiento, sin embargo, no está de acuerdo con esa tasación, de ahí que vaya a recurrir para reclamar los 990.000 euros que considera que valen las parcelas en cuestión.

El Consistorio adquirió catorce parcelas de un total de 193.600 metros cuadrados del entorno de Ametzagaina en la década de 1970, con el objetivo de proceder a la construcción de la primera fase de la citada necrópolis. El plan original preveía un camposanto de 25 hectáreas, que ocuparía gran parte de lo que hoy es el parque de Ametzagaina y se prolongaría hacia el este.

Finalmente, el proyecto se quedó sobre el papel. De ahí que, años después, los propietarios de las parcelas requeridas intentaran recomprarlas. Acudieron a los tribunales, que reconocieron su derecho a la reversión de la propiedad, y la mayoría pudo recomprar sus tierras.

Uno de los que no pudo hacerlo entonces fue el propietario del caserío Marrus, Rufino Cortadi, que recientemente volvió a intentar recomprar sus terrenos. De ahí que se pidiera una nueva actualización del precio que, finalmente, el Jurado Territorial de Expropiación Forzosa cifró en 391.000 euros.

Sin embargo, el precio actual de las tierras todavía no es firme, ya que el Consistorio no está de acuerdo con esa cantidad. En la Junta de Gobierno de la semana pasada, el Ayuntamiento decidió presentar un recurso contencioso-administrativo, al entender correctos, según los informes de los técnicos municipales, los 990.000 euros propuestos por ellos.

Una vez se establezca de manera definitiva el justiprecio de los terrenos, deberá ser la familia de Cortadi la que decida si asume la compra o no, ya que Rufino falleció hace unos meses, después de arrancar el proceso para volver a intentar recuperar sus tierras.

En su momento, en 1977, la familia Cortadi recibió 8,7 millones de pesetas por sus tierras, a los que habría que sumar 7,5 millones más por otras dos parcelas y el caserío.

Otras tierras Además de para el proyecto del nuevo cementerio, la Administración ha expropiado en las últimas décadas numerosas parcelas del entorno de Ametzagaina, también para la construcción del centro comercial Garbera o el vial que enlaza la rotonda con Martutene.

Además de en este caso, el justiprecio a la hora de comprar o revender terrenos ha sido motivo de polémicas en otros. El año pasado una sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) obligó al Ayuntamiento de Donostia a aumentar en 1,1 millones de euros el precio de expropiación de una finca en cuyos terrenos se sitúa el actual parque de Ametzagaina, en contra, en esa ocasión, del acuerdo del Jurado Territorial de Expropiación Forzosa de Gipuzkoa.