Donostia. Donostia es un monumento. Y si no lo es, debería serlo. El Gobierno Vasco tiene calificados como monumentos nacionales 28 construcciones de la capital. Entre ellos, se encuentran cinco edificaciones religiosas, mientras que las restantes 23 son seculares. Especial mención merecen también los caseríos de la ciudad que son patrimonio de Donostia. NOTICIAS DE GIPUZKOA hace en las siguientes páginas un breve repaso de las construcciones monumentales de la capital del territorio.

Entre ellos hay doce baserris de la ciudad que son monumentos. Destaca, por ejemplo, Katxola Berri, un caserío-lagar barroco ubicado en el paseo de Oriamendi en el barrio de Aiete. En los últimos años ha tomado relevancia, porque la asociación de vecinos Aiete Lantxabe está llevando a cabo bastantes actividades en él.

Entre los baserris catalogados se encuentran antiguas construcciones rurales, pero casi todas son posteriores al siglo XV, tales como Aliri, situado en Zubieta y del siglo XVI; Patxillardegi de Loiola, también del XVI; o el Tolare de Ibaeta (XVIII), entre otros.

Hay que destacar, por otro lado, que en los últimos años se está trabajando, precisamente, en la catalogación de muchos baserris de Donostia y del resto del territorio, por lo que la lista de casas protegidas y consideradas bienes culturales aumenta progresivamente.

Además de ellos, en las próximas páginas se señalan algunas de las construcciones que se han merecido la catalogación: desde las iglesias de la Parte Vieja, hasta casas señoriales, torres y edificios institucionales que se reparten por toda la ciudad.

Donostia cuenta con un riquísimo patrimonio arquitectónico, que la convierte en un monumento en sí misma.