Donostia. Intxaurrondo, Altza y la Parte Vieja son los tres barrios que más se han beneficiado los 48,5 millones que ha recibido la ciudad a través del primer y del segundo Plan Zapatero. Estas ayudas que concede el gobierno central para estimular la economía y el empleo han permitido ejecutar 71 actuaciones en Donostia, la mayoría de ellas en los barrios de la ciudad, tal y como explicó ayer el alcalde, Odón Elorza.

Intxaurrondo, Altza y la Parte Vieja han sido las áreas que más dinero han percibido, con 7,2, 6,1 y 5,1 millones respectivamente, seguidos de Amara y Ategorrieta-Ulia, donde se han invertido 5 y 4,2 millones.

En el primer barrio se acometieron mejoras de accesibilidad peatonal y vial, así como la rehabilitación de infraestructuras de saneamiento y pavimiento.

Similares fueron las intervenciones de Altza, donde también se construyó un aparcamiento en Casares y se rehabilitaron las plataformas de Txapinene.

La obra más importante de la Parte Vieja está siendo la renovación de la plaza Zuloaga de San Telmo, así como la restauración de las murallas del castillo de la Mota de Urgull y la cubierta y el acceso de la ikastola Orixe.

Entre las actuaciones más costosas se encuentran la construcción de las instalaciones deportivas de Puio Lanberri (3 millones), la compra de dotaciones tecnológicas para el Polo de innovación audiovisual de Zuatzu (3 millones) y la última fases de recuperación del parque Ametzagaina (2,3 millones).

Las reformas de las plaza de La Bretxa y Zuloaga, así como la ampliación del víal y las aceras de Zubieta también se encuentran entre los proyectos más caros, con presupuestos que rondan los 2,3 y 1,1 millones de euros. En las conexiones ciclistas y el desarrollo de la movilidad en bicicleta, por su parte, se han invertido 1,8 millones.