LA capital del Carnaval es Tolosa, eso nadie lo pone en duda, pero el pistoletazo de salida se da en Zaldibia: cuando el almacén de disfraces y complementos Jaiak se empieza a llenar de gente, quiere decir que la fiesta está a punto de empezar. NOTICIAS DE GIPUZKOA estuvo el lunes por la tarde en el polígono industrial Elbarrena para saber cómo llegan los carnavales de este año. A tenor de lo presenciado, la gente tiene ganas de juerga.
Los coches se agolpaban en la entrada al polígono y todas las plazas cercanas al pabellón de Jaiak estaban ocupadas. En el interior, gente de todas las edades a duras penas conseguía moverse entre los cientos de disfraces y complementos: los niños jugaban con las espadas de caballeros medievales o pedían a sus padres que les comprasen un artículo más, los adolescentes bromeaban con los objetos de carácter sexual? Todavía faltaban tres días para Jueves Gordo, pero el espíritu del Carnaval ya se había apoderado de todos ellos.
De hecho, hace ya varias semanas que la fiesta ha comenzado en Zaldibia. Según comenta el responsable del negocio Agustín Mujika, los tres últimos sábados han sido "una locura". No en vano, mucha gente de Goierri y Tolosaldea se acerca a Zaldibia para conseguir los elementos necesarios para disfrazarse. "También viene gente de Zumarraga, Andoain, Errenteria, Azkoitia, Azpeitia? e incluso de la Sakana".
Muchos se basan en la actualidad a la hora de elegir el disfraz. Los trajes de animales y de personajes famosos también gustan mucho. Así, este año dos de los disfraces más solicitados son el de pingüino y el de Amy Winehouse.
Mujika dice que es "terapéutico" trabajar en una tienda de disfraces. "Aquí los clientes se lo pasan bien: se ríen, prueban los artículos, se sacan fotos los unos a los otros? Sé de alguno que ha estado dos horas en el local y ha comprado sólo un pequeño complemento", recuerda.
Los amezketarras Jokin Agirre, Aimar Murua y Mikel Unsain no estuvieron tanto tiempo, pero se lo pasaron en grande. Agirre compró un disfraz de vaca y Murua, uno de toro. Unsain se emparejará con otro amigo, por lo que volverá a Zaldibia con él para elegir el traje. "Hemos comprado el disfraz para ir el domingo a Tolosa", explicó Agirre. En la cuadrilla son quince y tienen intención de ir "todos los días" a la capital del Carnaval. "Empezaremos el jueves y, si seguimos vivos, iremos incluso el martes", concluyó.
El propio Agustín Mujika también tiene costumbre de ir a Tolosa, pero la mayoría de los días le toca disfrutar de la fiesta en su local. "Trabajaremos hasta el lunes y el martes iremos a Tolosa. El año pasado me disfracé de esquimal y de agente de tráfico. Me puse en la rotonda situada delante del almacén", recuerda. No en vano, el lunes de Carnaval los doce empleados de Jaiak trabajan disfrazados. Hay que dar ejemplo... Está claro que Zaldibia se ha convertido en uno de los puntos neurálgicos del Carnaval en Gipuzkoa.