Juanes se ha querido sincerar como nunca con todos sus seguidores y hablar sin tapujos y con detalle de los problemas de salud mental que ha sufrido a lo largo de los años, unos duros momentos que ha querido explicar con mayor profundidad que en ocasiones anteriores.

 

El intérprete de ‘La camisa negra’ se ha desahogado en un extenso texto en una de sus últimas publicaciones de Instagram con el objetivo de que su experiencia pueda servir y ayudar a otras personas que estén pasando por la misma situación. 

JUANES SE SINCERA SOBRE SUS PROBLEMAS DE SALUD MENTAL 

El artista ha hecho un repaso por las crisis que ha sufrido a lo largo del texto y ha compartido con sus seguidores algunas de las decisiones que le ayudaron a manejar esas situaciones de la mejor manera posible. 

El cantante ha confesado que le ha costado mucho escribir estas palabras y ha asegurado que aunque fueron muchos los que pensaban que tenía una vida idílica debido a su fama,“una cosa es clara: nadie sabe a ciencia cierta lo de los otros. Todos, absolutamente todos, cargamos una cruz, una pena personal, un dolor o frustración, independientemente de nuestra clase social, religión o profesión. De hecho, el éxito profesional no garantiza la felicidad, tampoco el dinero. Pasamos una vida pensando que seremos felices cuando tengamos esto, que seremos felices cuando tengamos aquello, pero cuando llega eso tampoco lo somos... Y así se nos va la vida entera, trabajando para conseguir eso que soñamos, pero olvidando disfrutar del proceso”, subraya. 

Juanes también ha recordado el momento exacto en el que sintió que todo se venía abajo, hace trece años, cuando “sufrí uno de los golpes más duros de mi vida. Estaba en pleno apogeo de mi carrera, cientos de conciertos, a primera vista una vida perfecta y envidiable. Pues bien, por dentro estaba destruido, desilusionado y cansado. Había trabajado tanto durante los últimos 10 años que había perdido momentos clave de mis hijos, había dejado de lado mi cuidado personal por dar gusto al mundo. Lo peor es que yo fui el único culpable, nunca tuve la fortaleza de decir que estaba cansado y necesitaba un descanso. O si lo hice, creo que no me tomaron en serio. Siempre pensé que sería capaz. Por favor, era Juanes, claro que podía. Ese pensamiento me llevó a un colapso nervioso que me obligó a detener abruptamente todas mis actividades para estar en casa con mis hijos. Fue la mejor decisión que tomé en mi vida”, revela en el citado texto, antes de confesar que llegó a refugiarse en el alcohol para sentirse más reconfortado. 

“Hoy miro hacia atrás y agradezco la valentía de haber hecho lo que hice. Algunas personas de mi entorno, muy pocas, me hacían pensar que estaba loco, que necesitaba un psicólogo y que no era normal lo que estaba experimentando. Mientras tanto, yo buscaba ayuda en el alcohol para tratar de anestesiar y poder seguir. El resultado fue peor. Llegué a un punto de cansancio tal, que odiaba verme al espejo, escuchar mi música, verme en alguna publicación y, lo más doloroso, no disfrutar de estar en un escenario. Pero claro, habían pasado 10 años sin descanso, de conciertos, de viajes, ausencias y más, que terminaron pasando factura”, cuenta el colombiano.

Finalmente, Juanes pudo tomar decisiones que le ayudaron a cambiar su estilo de vida, y tomó la determinación de descansar durante un tiempo y estar al lado de los suyos, algo que lo ayudó a recuperarse tal y como él mismo ha desvelado: “Le dije a mi madre, a mi esposa, a mis hermanos y a mis cercanos que estaba pensando en darme un descanso, que necesitaba dejar de viajar por un momento y dedicarme a reconstruirme. La respuesta de todos, o casi todos fue hermosa: ‘Descansa, Juan, te necesitamos sano de mente y corazón’. Todo esto sucedió hace 13 años, cuando no era normal que se hablara de depresión y mucho menos si eres un artista exitoso”, asegura el cantante.

Antes de finalizar su texto, Juanes lanza un mensaje de ánimo y esperanza a todos aquellos que se encuentren atravesando la misma situación que él vivió.

“Recuerden, todos podemos sufrir depresión y hablar de ello es una buena manera de combatir una enfermedad silenciosa y poderosa que puede acabar con vidas. No dudes en buscar ayuda si la necesitas. Existen herramientas y expertos que te muestra la luz y te acompañan. Siempre habrá alguien afuera que se solidarice contigo... Hoy puedo escribir estas palabras después de muchos años y muchas tristezas. Logré salir adelante. Me repuse internamente. No he vencido a la depresión, pero la manejo mucho mejor. Y puedo decir que soy más feliz y exitoso que nunca antes en mi vida. Me siento orgulloso de mí por haber tomados las decisiones que tomé en el pasado para sanarme, estar cerca de mis hijos, ser mejor artista y ser humano. Tú también puedes. ¡Ánimo!”.