En imágenes: Así son los ocho lugares abandonados más secretos de Euskal Herria
Fotoquintas / E. D. / Eloy Corres / Rubén Plaza / Borja Guerrero / Víctor Manuel Egia / Iker Azurmendi / Redaccion DNA / Fondo Documental Erronkari / Ángel Ruiz de Azua / Carlos Ciáurriz
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Vista del Castillo de Portilla.
Fotoquintas
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Vista aérea del palacio Hurtado de Amezaga en Gueñes.
E. D.
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Vista exterior del monasterio de Piérola.
Eloy Corres
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Vistas de la fábrica abandonada de Ingemar.
Rubén Plaza
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Vistas de la central nuclear de Lemoiz.
Borja Guerrero
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Vista de la arcada sobre el río Legartza de la Real Fábrica de Municiones y Armas de Obaitzeta.
Víctor Manuel Egia
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Antiguo instituto de Martutene que se encuentra abandonado.
Iker Azurmendi
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
El Castillo de Portilla.
Redaccion DNA
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Los hornos de la Real Fábrica de Municiones y Armas de Obaitzeta.
Víctor Manuel Egia
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Una vieja casa abandonada, rodeada de vegetación en el despoblado de Larrangoz.
Fondo Documental Erronkari
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Instalaciones de la central de Lemoiz.
Ángel Ruiz de Azua
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Ventanas rotas en el antiguo instituto de Martutene.
Iker Azurmendi
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
La central nuclear de Lemoiz.
Borja Guerrero
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Vista de Larrangoz. Carlos Ciáurriz.JPG
Carlos Ciáurriz
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Imagen de la empresa Ingemar, en estado de abandono, en Usurbil.
Rubén Plaza
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.
Repleta de montañas, valles y aguas indómitas, Euskal Herria guarda en sus rincones más escondidos un legado que pocos se atreven a explorar. Compuesta por los vestigios de lugares que un día palpitaban con vida y hoy reposan en el más profundo silencio, nuestra travesía nos lleva a recorrer la senda de lo olvidado, donde cada paso resuena en ecos de historias no contadas en estos ocho lugares abandonados tan espectaculares.