En la india, tierra de héroes, místicos, sabios, yoguis y vacas sagradas, todo se funde con el perfume del jazmín y las especias y con la espiritualidad de la meditación ayurvédica. Es casi imposible que el viajero no se impregne del sabor y el olor de un país que no trata a sus turistas como viajeros, sino como huéspedes
El Taj Mahal, una de las siete maravillas del mundo.
Francisco Gavilán
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Conmemoración festivo religiosa en Jaipur.
Francisco Gavilán
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El Fuerte Rojo, en la Vieja Delhi.
Francisco Gavilán
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Los elefantes portan a los turistas hasta el Fuerte Rojo de Agra.
Francisco Gavilán
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Ascensión al Fuerte Rojo.
Francisco Gavilán
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Detalle de la entrada al Fuerte Rojo.
Francisco Gavilán
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Vendedores ambulantes en Jaipur.
Francisco Gavilán
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Templo de Naulakak.
Francisco Gavilán
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Motos, bicis y tuk-tuks, en una callejuela de la Vieja Delhi.
Francisco Gavilán
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Festival Folclórico.
Francisco Gavilán
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Todo tipo de transportes 'conviven' por las carreteras.
Francisco Gavilán
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Mujeres en un mercado.
Francisco Gavilán
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Otro templo.
Francisco Gavilán
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Encantadores de serpientes.
Francisco Gavilán
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Detalle del Taj Mahal.
Francisco Gavilán
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otra
Francisco Gavilán
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Madre e hija en la ciudad mogol de Fatehpur Sikri.
Francisco Gavilán
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