Los cambios son acelerados. El sector de la automoción y el transporte, uno de los más competitivos e innovadores, se transforma y augura un futuro sostenible en favor de un planeta descarbonizado. Tanto Euskadi como Navarra se han puesto manos a la obra y ya han puesto el foco en 2050, año en el que se prevé que la electrificación haga sombra al combustible, según la Comisión Europea.

Aviones, trenes y barcos han recuperado el funcionamiento previo a la crisis sanitaria del coronavirus

Los nuevos agentes del ecosistema de la movilidad del futuro se preparan para la gran transformación que vivirá la industria automovilística. La electrificación y la tecnología jugarán un papel fundamental, lo que supondrá que los vehículos eléctricos sean los únicos que se conduzcan por las carreteras de todo el mundo.

En Euskadi existen más de 300 empresas que componen el sector de la automoción. En ellas trabajan desde fabricantes de máquina-herramienta, aceristas, hasta consultorías e ingenierías. Tal es su impacto que entre todas generan más de 18 mil millones de euros al año empleando a más de 85.000 personas.

Por su parte, Navarra cuenta con 112 empresas cuyo volumen de negocio asciende a 5,1 billones de euros y da trabajo a 12.000 personas. En la actualidad, todas esas fábricas están inmersas en innovar, aunque se encuentran también en una situación de incertidumbre, sobre todo por la preocupante falta de chips o también conocidos semiconductores, lo que está frenando la producción de vehículos en todo el mundo. De momento no hay solución para el problema y no será hasta principios de 2022 cuando se ponga punto final a la crisis.

Energía eólica

No obstante, la industria automovilística trabaja sin cesar en la producción de vehículos eléctricos, autónomos y conectados. Y es que así serán los coches del futuro. En 2040 dejarán de comercializarse los que hasta la fecha conocemos como motores de combustión. La gasolina tiene los días contados y los coches libres de emisiones tóxicas serán los únicos que se comercialicen.

Euskadi y Navarra ya se preparan para el nuevo cambio, y para ello ya piensan en aumentar los puntos de carga para facilitar la recarga de los coches dotados de pila combustible. Para ello, las gasolineras presentarán un aspecto muy diferente al que estamos acostumbrados. Los surtidores de combustibles serán sustituidos por energía eólica. En la Comunidad Autónoma Vasca está previsto que se instalen más de 4.500 puntos de recarga al igual que en su comunidad vecina. Se estima que los cambios sean inminentes es por eso por lo que para 2025 dichos datos deberán hacerse realidad.

Navarra será sede de un nuevo laboratorio de biocombustibles y fabricará energías renovables para el transporte

Petronor y otras redes de gasolineras ya se adaptan al nuevo cambio, al igual que empresas de distribución y comercialización de energía como Iberdrola, que tratarán de impulsar la movilidad sostenible y de cero emisiones. Tal es el compromiso por la transformación que Navarra será la nueva sede de un nuevo laboratorio de biocombustibles y fabricará energías renovables para el transporte.

El transporte público se reinventa

Pero el coche privado no es el único que está apostando por mejorar. El transporte público también se está reinventando. Los autobuses del futuro serán silenciosos y modernos, y tendrán que cargarse durante tres horas por la noche. Gipuzkoa ha sido la primera ciudad del Estado en probar el primer autobús totalmente eléctrico. Poco a poco todos presentarán el mismo aspecto: mamparas de seguridad, cámaras de vídeo vigilancia y rampa de acceso.

Con la nueva normalidad los aviones, trenes y barcos han recuperado el funcionamiento previo a la crisis sanitaria del coronavirus. Por ejemplo, los aeropuertos de La Paloma en Bizkaia, Foronda en Álava y Noáin en Navarra han vuelto a acoger a una gran multitud de viajeros durante la época estival. Las cifras de pasajeros han aumentado significativamente en los territorios vascos y navarro. Por otro lado, las cargas de mercancías en los puertos de Bilbao y Pasaia también han mostrado mejoras en sus actividades.

Todos los medios de transporte son necesarios, de ahí que se implementen mejoras de innovación. Todavía quedan años para ver un cambio que se inclina hacia lo sostenible, es decir, hacia lo respetuoso con el medio ambiente. Se trabaja sin cesar en esa línea aunque no solo se buscan mejoras para cuidar el planeta sino también para la comodidad y bienestar de toda la ciudadanía.