La deuda pública vasca bajará dos puntos en diez años, hasta el 10,7%, si se mantiene el actual comportamiento fiscal, según prevé un estudio publicado ayer por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea).

Según este estudio, el conjunto de la deuda autonómica a diferencia de lo que ocurriría en Euskadi crecería 2,3 puntos porcentuales en los próximos 10 años, hasta el 24,4% en 2034.

Comunidades Autónomas

El trabajo La deuda pública de las Comunidades Autónomas. Escenarios de evolución y estimación del esfuerzo de consolidación fiscal necesario, elaborado por la analista de investigación de Fedea, Carmen Marín y el catedrático de Economía de la Universidad Pablo de Olavide Diego Martínez constata que existe un problema de deuda pública en las comunidades, de notable envergadura en algunas de ellas, y concluye que no hacer nada no es la receta adecuada.

Este análisis certifica que existe una heterogeneidad muy elevada, con comunidades que ya se encuentran en el nivel del 13% marcado por la ley e incluso pueden permitirse pequeños déficit primarios en los próximos años, como Euskadi, cuya deuda era del 12,7% en diciembre de 2023 según datos del Banco de España, Nafarroa, Canarias y Madrid.

Superávit

Por el contrario, Catalunya, Murcia y Castilla-La Mancha deberían alcanzar superávit primarios anuales de en torno al 1,3% del PIB para lograr el objetivo del 13% en 2033 y la Comunidad Valenciana necesitaría superávit superiores al 2%.

En este contexto, los autores afirman que si el comportamiento fiscal de las comunidades se mantiene a lo largo de la próxima década -el que definen como escenario “conservador”- la mayoría de ellas verían empeorar sus ratios de deuda pública/PIB en 2034, algunas sustancialmente, como Murcia y la Comunitat Valenciana, que alcanzarían el 42,4% y en el 55,3%, respectivamente.