El Gobierno vasco aprobó ayer la prórroga del contrato relevo para el personal laboral fijo de la Administración Pública -una medida que, según fuentes sindicales, beneficiará a 700 trabajadores- tras el acuerdo alcanzado con CC OO y UGT, un pacto del que se desmarcaron ELA y LAB. El Ejecutivo destacó que la negociación propiciará que la temporalidad en el ámbito de los empleados públicos de la Administración se reduzca “por debajo del 8%”, un logro que, a su juicio, hará que esta medida “podrá ser extensiva a la práctica totalidad de las personas trabajadoras laborales fijas de la Administración”.

La negociación de ayer tuvo como marco la Mesa General de la Administración, con la presencia de UGT y CC OO y la ausencia de ELA y LAB, pese a los “reiterados intentos” para incorporarlos al acuerdo, según el Gobierno vasco. La Administración General de la CAV está desarrollando el proceso de consolidación de sus empleados públicos. En próximas fechas, se adjudicarán las primeras plazas y el proceso se completará a finales de este 2024. Esto se va a traducir en que “apenas” van a quedar plazas de laborales temporales y “se reducirá de facto la temporalidad por debajo del 8%, con lo que esta medida podrá ser extensiva a la práctica totalidad de las personas trabajadoras laborales fijas de la Administración”, indicó el Gobierno vasco. “En todo momento hemos apostado claramente por la puesta en marcha de este contrato; este acuerdo refleja nuestra prioridad por la mejora de las condiciones laborales y una apuesta clara por la mejora del servicio público”, explicó el viceconsejero de Función Pública, José María Armentia.

El área de Función Pública destacó que en los últimos meses sus representantes han acudido a la Mesa General “con propuestas de mejora de las condiciones” del personal empleado público”, en materias tales como “completar el desarrollo reglamentario de la ley de empleo público, el compromiso de nuevas ofertas y convocatorias de empleo público, mejoras en permisos y licencias, o la implantación de la carrera profesional”. Armentia remarcó la “actitud negociadora” y la “clara voluntad” de Lakua para alcanzar un acuerdo con todos los sindicatos, pero lamentó la ausencia de ELA y LAB. “No entendemos que, ante una negociación con unos contenidos que favorecen a los trabajadores, no hayan venido”, indicó Armentia, que atribuyó a la “cerrazón” la intención de ambas centrales de “desgastar” al Ejecutivo vasco.

En una nota de prensa, el sindicato UGT Euskadi celebró el “éxito de la presión sindical” que “ha forzado al Gobierno vasco a firmar” un acuerdo que, además, permitirá la jubilación anticipada en las “máximas condiciones que la legislación permite y la creación de nuevos empleos para jóvenes”. La central subrayó que este acuerdo “abre la puerta” a la jubilación parcial para el personal funcionario y estatutario en un futuro “muy próximo”. Por su parte, CC OO se felicitó por la consecución del acuerdo y recordó que “el personal laboral que cumpla con los requisitos legales durante este año, podrá acogerse al contrato de relevo como ha venido sucediendo en los últimos años”. El sindicato explicó que esta medida “beneficiará” a más de 700 empleados y destacó que se trata de “una herramienta para el rejuvenecimiento de plantillas y fomento del empleo”.

En un comunicado, ELA criticó que el texto pactado entre el Gobierno vasco, UGT y CCOO “dificulta aún más el acceso a la jubilación parcial entre los laborales del sector público” ya que, según ha denunció, “aumenta los años cotizados y la edad de jubilación y solo podrá acceder a la jubilación parcial el personal fijo”. El martes, LAB reiteró su negativa a firmar el acuerdo y acusó al Gobierno vasco de “intentar despedir” a los trabajadores públicos “con recortes”. l