El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha visitado hoy las instalaciones de la empresa tecnológica de Donostia Irisbond en un gesto de apoyo a la actividad que desarrolla y que se enfoca a aplicar la Inteligencia Artificial para permitir que personas con una diversidad funcional que les impide hablar sean capaces de comunicarse con el movimiento de los ojos. “Hoy demostramos que es posible facilitar la vida de las personas”, ha afirmado el lehendakari tras felicitar por la labor que desarrolla a Irisbond, una firma que tiene como objetivo afianzarse en Estados Unidos.

Iñigo Urkullu, acompañado de una nutrida representación institucional en la que, entre otras autoridades, se encontraba la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza; la consejera vasca de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia; y la consejera vasca de Sanidad, Gotzone Sagardui, ha tenido ocasión de conocer la base en la que se asienta la tecnología aplicada por la empresa donostiarra con las explicaciones de su director y cofundador, Eduardo Jauregui. El dispositivo Hiru emplea Inteligencia Artificial para captar el movimiento de los ojos de una persona y traducirlos en movimiento precisos dentro de una pantalla del mismo modo que se haría con un ratón y posibilita de esta forma la comunicación.

Uno de los momentos que el lehendakari ha definido como “emotivo” ha sido la reunión con Paule, una niña con diversidad funcional del habla, con la que ha podido conversar gracias a esta tecnología. “Eres un ejemplo, un espejo en el que se mirarán muchas personas”, ha asegurado dirigiéndose a la niña, al tiempo que ha subrayado el efecto positivo de la propuesta de Irisbond en la sociedad. “Maite zaitut. Dos sencillas palabra que la gran mayoría de nosotras y nosotros podemos exteriorizar sin problema y que, sin embargo, suponen un muro infranqueable para las personas que las sienten y no pueden expresarlas”, ha señalado, para añadir que con esta iniciativa esta barrera se rompe.

Otras aplicaciones son la detección precoz y el diagnóstico de enfermedades neuronales y su empleo en máquinas de quirófanos

En un plano más político, ha subrayado que estos proyectos son posibles gracias a la colaboración público privada puesto que ambos coinciden en tener como objetivo mejorar la vida de la ciudadanía. Irisbond tiene una estrecha relación con el sector público, puesto que su proyecto ha sido financiado por el programa Hazitek Singular Estratégico que impulsa el Gobierno Vasco, mientras que recientemente, en octubre del año pasado, la empresa tecnológica guipuzcoana recibió una inyección de capital de dos millones de euros por parte de un grupo de inversores entre los que se encuentra la Sociedad de Capital Riesgo SGEIC del Grupo Spri.

Su tecnología además está implantada en Servicio Público de Salud vasco Osakidetza, y hay más de 4.000 personas en todo el mundo que ya utiliza este sistema para comunicarse. Jauregui ha recordado que su solución tiene otras aplicaciones en las que la plantilla, conformada por 35 profesionales, profundizará. Entre las aplicaciones citadas figura la detección precoz y el diagnóstico de enfermedades neuronales como el alzheimer o el parkinson, y su empleo para manejar sin contacto dispositivos o máquinas en quirófanos.

OBJETIVOS

Entre los objetivos que se ha planteado para los próximos años destaca su apuesta por el mercado estadounidense, donde ya dispone de una oficina comercial ubicada en Boston, uno de los enclaves del país donde se concentran los avances en materia de salud. El reto es crear la estructura necesaria para que pueda operar de manera autónoma y traccione negocios más avanzados, según anuncia. Del mismo modo, sus previsiones apuntan en que en los dos próximos años su plantilla se duplique para atender a desafíos como extender su producto al conjunto de las comunidades autónomas del Estado o desarrollar biomarcadores avanzados para capturar un alto número de datos y gestionarlos de manera cibersegura.