La novedad de la presente edición del congreso del Grupo Mondragon ha sido la creación de una nueva división de conocimiento con el objetivo de reforzar la colaboración entre todas las cooperativas que desarrollan su actividad en este ámbito para “abordar retos más complejos en el futuro”.

Los compromisarios aprobaron la propuesta que, bajo el título Estructuración de la División de Conocimiento” de Mondragon, planteaba una nueva unidad que agrupa tanto a centros formativos como a agentes investigadores para crear un ecosistema propicio al desarrollo en conocimiento.

La nueva división cuenta con once entidades. Los centros educativos participantes son Arizmendi Ikastola, Politeknika Txorierri y Lea Artibai. También está integrada Mondragon Unibertsitatea con sus facultades de ingeniería, empresariales y humanidades. Por último, se encuentran los centros tecnológicos Ikerlan, MIK, Lortek y Leartiker, tal y como dio a conocer ayer la alianza cooperativa con sede en Arrasate.

Según explicó, esta iniciativa es “una apuesta de futuro” y persigue agrupar y coordinar las actividades que desarrollan estas entidades por separado para enfocarlas hacia objetivos comunes “más ambiciosos”. La idea es “comprometerse en el desarrollo de proyectos conjuntos y enfocar sus retos estratégicos desde una óptica compartida, mejorando la cooperación entre Mondragon, sus cooperativas y la propia división de conocimiento”.

empleo

Esta división agrupará 2.000 empleos con un presupuesto de 150 millones de euros con los que el Grupo Mondragon aspira a “desarrollar un proyecto socio-empresarial más potente en el ámbito del conocimiento que además permita abordar” proyectos con una mayor complejidad.

El congreso de Mondragon, que se celebró tras el extraordinario en el que se trató la salida de las cooperativas Ulma y Orona, se completó con trámites más relacionados con la gestión interna de la Comisión Permanente presidida por Leire Mugerza y del Consejo General por Iñigo Ucín.