El pasado ejercicio estuvo marcado por una imparable escalada de la inflación, pese a que logró corregirse a finales de año, y causó serios quebraderos de cabeza a unos trabajadores guipuzcoanos que no vieron compensado este encarecimiento de los precios de los productos en sus sueldos. Este problema se agudizó por la débil base de la que partía el territorio, cuya ciudadanía entre 2012 y 2021 vio incrementado su poder adquisitivo por debajo de los cuatro puntos porcentuales que la inflación de 2022 hizo desaparecer. Dependerá ahora de la negociación colectiva que la situación pueda encauzarse.
Un estudio elaborado por el departamento de Hacienda y Finanzas de la Diputación de Gipuzkoa analiza la evolución de los salarios en la década que transcurre entre 2012 y 2021, en la que la inflación tuvo un incremento acumulado del 7,9% mientras que los salarios subieron poco por encima de este índice, con un comportamiento muy diferente según el tipo de organización.
Los trabajadores de administraciones públicas con sede en Gipuzkoa fueron los más beneficiados, puesto que sus salarios crecieron en la década entre 2012 y 2021 un 11% lo que significa que su poder adquisitivo creció en 3,9 puntos porcentuales. Las personas que desempeñaban su actividad en Sociedades Anónimas también se encuentran entre las más altas de la tabla, con un aumento del 3,1% de su capacidad de consumo.
En Gipuzkoa, en 2021 se contabilizaban 324.443 perceptores de salarios, con un avance del 1,5% sobre el año anterior
El resto de organizaciones empresariales se encuentran en niveles inferiores a los tres puntos. Las más cercanas son las sociedades de responsabilidad limitada, cuyos empleados han incrementado en la última década un 2,8% su poder adquisitivo, muy lejos de los 1,9 puntos porcentuales en los que vieron aumentados los salarios de las personas que trabajan en las cooperativas.
En el extremo opuesto se encuentran los trabajadores de empresas personales, en su mayor parte constituidas en el ámbito de los servicios y el comercio, donde se ha producido una importante caída del poder adquisitivo, que el informe elaborado por el departamento foral de Hacienda y Finanzas fija en casi cinco puntos porcentuales.
En Gipuzkoa, en 2021 se contabilizaban 324.443 perceptores de salarios, con un avance del 1,5% sobre el año anterior, mientras que el total destinado a pagar estos sueldos ascendía a 8.733 millones de euros y experimentaba un incremento superior, de 5,5 puntos porcentuales. El sueldo medio se estableció en 26.916 euros anuales, aunque en este caso también se producen notorias diferencias, en consonancia con la adquisición de poder adquisitivo según el modelo de empresa.
DISPARIDAD DE SUELDOS
La función pública es la mejor pagadora, con un sueldo medio de 35.908 euros anuales, seguido de las sociedades anónimas que abonan un salario medio de 31.234 euros. Otro tipo de sociedades y las cooperativas se acercan a una media de 26.500 euros al año, mientras que las empresas personales, aquellas constituidas por una única persona que asume las pérdidas incluso con su patrimonio propio, registraron un salario medio de 12.475 euros anuales.
Una mirada que concreta más las actividades indica que quienes trabajan en Banca y Seguros son las personas que reciben sueldos más elevados con una media anual de 43.020 euros en 2021 en Gipuzkoa. También disponen de una buena remuneración las plantillas de Energía y Agua con un sueldo medio de 32.830 euros. En tercer lugar se encuentra la industria, de importante peso en el desarrollo económico guipuzcoano cuya remuneración anual media se sitúa en los 32.148 euros.
Desde el punto de vista del tamaño de la empresa, se aprecia que aquellas compañías que tienen mayores dimensiones disponen de la suficiente fuerza como para remunerar a sus empleados con mayores cantidades. Por lo general, este tipo de organizaciones empresariales tienen una fuerte proyección internacional y muchas de ellas están diversificadas, lo que facilita una mayor entrada de ingresos.
La escasez de talento, además, afecta de manera directa a empresas de más de 500 trabajadores, que entre otras iniciativas buscan retenerlo con unos salarios más altos y en Gipuzkoa, de media, pagan 30.452 euros. Una cantidad muy lejana de los negocios de un tamaño mucho más reducido, con ingresos también más limitados y que, de media, abonan un sueldo medio de 19.719 euros al año.
DESIGUALDADES
A pesar de que Gipuzkoa figura como uno de los territorios con menores niveles de desigualdad, como lo demuestra el índice Gini que la sitúa en octava posición de todo Europa en términos de igualdad, todavía presenta aspectos de mejora por lo menos en lo que se refiere a los salarios.
El informe del departamento foral de Hacienda y Finanzas constata que el 10% de los guipuzcoanos con el sueldos más altos cobran 48,6 veces más que el 10% de los trabajadores del territorio que perciben los salarios más bajos. Si se amplía el colectivo la comparación tampoco resulta tranquilizadora, puesto que el 20% de quienes cobran más alto lo hacen 14,8 veces por encima del 20% de los menos favorecidos.
De la cantidad total que se destinó en 2021 a abonar salarios en Gipuzkoa, el 26,8% se dirigió a un 10% de trabajadores.
