- El gasto público en sanidad o pensiones por el envejecimiento de la población y el encarecimiento de los servicios aumentarán globalmente en ocho puntos del PIB la presión fiscal en la OCDE de aquí a 2060 si no se llevan a cabo reformas para afrontar el reto demográfico.

Es la principal conclusión de un informe publicado ayer martes por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que defiende “un conjunto ambicioso de reformas” del mercado de trabajo y de las pensiones.

Según la OCDE, se trata de aumentar la tasa de empleo con la eliminación de las jubilaciones anticipadas, pero también de vincular la edad de jubilación a la esperanza de vida con ocho meses de trabajo más por cada año de esperanza de vida adicional.

Eso podría reducir a la mitad la presión fiscal esperada para las próximas cuatro décadas, que en realidad difiere bastante de un país a otro por su estructura demográfica actual y su evolución previsible, tal y como defiende la OCDE es su informe.

Los países que en términos relativos afrontan los mayores retos para sus finanzas públicas son Eslovaquia (17,21 puntos porcentuales de PIB de presión fiscal adicional), Polonia (13,95) y España (13,25).