- Euskadi recibirá entre 2021 y 2023 un total de 538 millones de euros, de los 14.214 que el Gobierno español ha repartido entre las comunidades autónomas del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR), según detalló ayer el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco, quien criticó que “las actuaciones finalistas para las que se han distribuido los fondos no tienen un claro carácter inversor ni transformador”. Azpiazu explicó que la repartición del MRR se ha realizado bajo criterios de afectación de la pandemia, de manera que el Estado español ha sido el primer receptor de fondos, con un total de 70.000 millones para subvenciones y otros 70.000 millones para préstamos. Sin embargo, cuestionó que este no ha sido el criterio de reparto interno entre las comunidades autónomas.

El dinero que le tocaría gestionar a las autonomías serían 35.000 millones de euros, de los que por el momento se han distribuido 14.214 -un 40% de los previstos- y apenas 538 millones corresponden a Euskadi. Esto supone un 3,78% del total de los fondos repartidos entre las autonomías, por debajo del peso de la economía vasca, de un 6,2% aproximadamente. Según Azpiazu, el motivo es que el reparto se está realizando con criterios de cohesión, y esto penaliza a las comunidades autónomas “con mejor posición relativa en el desarrollo de las políticas públicas que se pretenden impulsar con ayuda de los fondos europeos, como es el caso de Euskadi”.

Sobre el modo de repartir, el consejero criticó dos hechos. Por un lado, la “casi nula capacidad de influencia” de las comunidades autónomas a la hora de distribuir las ayudas. “Los fondos distribuidos tienen un carácter finalista y se transfieren con encomiendas de gestión, diseñadas por el Gobierno español y negociadas con Europa sin tener en cuenta a las comunidades autónomas, aun tratándose de actuaciones a desarrollar en competencias propias de las comunidades”, señaló.

“Esos programas están claramente definidos en las conferencias sectoriales, donde se ha especificado tanto la distribución por comunidad autónoma como el para qué de esos fondos”, añadió al respecto el viceconsejero de Economía y Fondos Europeos, Jordi Compàs, también presente en la rueda de prensa. Según detallaron, en algunas conferencias sectoriales como las relacionadas con el cuidado de las personas o la transformación del sector turístico las comunidades han podido intervenir en el diseño final, pero en otras, como la relativa a la enseñanza, la capacidad de intervenir ha sido “muy limitada o inexistente”.

La otra crítica es que “se ha primado la recuperación de la actividad económica en lugar de los proyectos transformadores”. Por ejemplo, la mayor transferencia de todas para este 2021 -que asciende a 82,4 millones- está destinada a rehabilitación de vivienda y regeneración urbana. Asimismo, otros 119,49 millones se destinarán a un plan de choques para la economía de cuidados y el refuerzo de las políticas de inclusión.

“Se ha distribuido con criterios de cohesión y pensando más en la recuperación de la actividad económica que en lo que sería la transformación de la economía para situarla en otros parámetros, que es lo que de alguna manera entendemos que Europa exige, quiere o prefiere y el Gobierno Vasco, en este sentido, también”, señaló el consejero.

Otra parte de los fondos europeos va a ser de gestión directa por parte del Estado, que los repartirá mediante convocatorias de ayudas, destinadas tanto a entidades locales como a familias, empresas, universidades, centros tecnológicos, etc. Hasta la fecha se han lanzado un total de 39 convocatorias con una inversión conjunta que asciende a más de 3.300 millones. De esa cuantía se desconoce por el momento lo que llegará a Euskadi.

En este sentido, Azpiazu confió en que las convocatorias que faltan por salir “respondan más y mejor al necesario carácter transformador que estos fondos han de tener sobre la economía en su conjunto y que la inversión permita recuperar el stock de capital que se ha visto deteriorado en el conjunto de la economía estatal desde la Gran Recesión”. “Es el momento de la inversión y así lo vamos a hacer con nuestros propios recursos”, señaló.

“La distribución de los fondos no tiene un claro carácter inversor ni transformador”

Consejero de Economía y Finanzas

“En las conferencias sectoriales se ha fijado tanto la distribución como el para qué”

Viceconsejero de Economía