- La escalada de precios iniciada en España en enero, impulsada por el precio de la electricidad, se ha frenado en febrero, cuando el índice de precios de consumo (IPC) se ha mantenido sin cambios con respecto al mismo mes de 2020. El Instituto Nacional de Estadística publicó ayer el indicador adelantado del IPC de febrero, que arroja una tasa del 0%, cinco décimas inferior a la de enero (0,5%), mes que registró el primer repunte desde febrero de 2020.

A lo largo de casi todo 2020 los precios encadenaron caídas debido a los efectos de la pandemia del covid sobre la actividad, que fueron especialmente intensas en mayo (0,9%), octubre (0,8%) y noviembre (0,8%). Tras nueve meses consecutivos de descensos, el repunte de enero estuvo marcado por el fuerte aumento de los precios de la electricidad debido a los efectos de la borrasca Filomena.

De hecho, el precio de la electricidad ha sido uno de los elementos que han presionado a la baja el IPC en febrero, ya que esta fuente energética se ha abaratado más que en el mismo mes de 2020. Junto a la electricidad, los paquetes turísticos se han encarecido menos de lo que lo hicieron en febrero de 2020. Por el contrario, los carburantes y combustibles han presionado al alza los precios, ya que este año han subido cuando el pasado bajaron, en línea con los primeros compases de la pandemia.

La subdirectora de ATL Capital Susana Felpeto advierte de que en los próximos meses los datos de inflación se enfrentan a la “distorsión” que supone la fuerte caída de los precios del petróleo el pasado año.

También el profesor de Economía de la Universidad CEU San Pablo Miguel Córdoba señala que “evidentemente el efecto covid está teniendo su influencia”, ya que mientras la alimentación “está aportando un poco de inflación”, otros elementos como la vivienda o el transporte presionan a la baja.