- La recaudación fiscal de las tres haciendas forales de los territorios de la CAV cayó el pasado 2020 por efecto de la crisis generada por la pandemia de coronavirus en algo menos del 10%, en concreto un 9,8%, hasta quedar en un total de 13.949 millones de euros, un porcentaje inferior al 20% estimado en un primer momento por el Gobierno Vasco y al 13,3% calculado en octubre por el Consejo Vasco de Finanzas.

Aunque el hecho de que los ingresos fiscales de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa caigan casi el 10% nunca es una buena noticia, pero que la reducción de los ingresos sea menor a la temida no deja de ser un alivio.

En enero del año pasado la previsión recaudatoria ascendía a 15.767 millones de euros, una cifra que se quedó en papel mojado a la vista de los efectos del parón de la actividad económica provocado por el confinamiento y la posterior crisis económica derivada de la pandemia de COVID-19, así como por las medidas tributarias, aplazamientos de pago de impuestos principalmente, aprobadas para facilitar liquidez a microempresas, pymes y autónomos.

La última estimación oficial contemplaba cerrar el año con unos ingresos vía impuestos de 13.411 millones de euros pero la recuperación de la recaudación en el tramo final del ejercicio ha permitido superar esa cantidad hasta llegar a los 13.949 millones, es decir, unos 537 millones más.

Con todo, no hay que olvidar que la reducción de casi el 10% en los ingresos vía impuestos en los tres territorios forales el pasado año ha supuesto un roto para las haciendas públicas aunque, afortunadamente, lejos del desastre temido en primavera en el punto álgido del confinamiento, con el cierre de fábricas incluido.

Incluso, las cifras definitivas han dejado como extremadamente prudentes, algo que no es negativo en estas circunstancias, a los responsables públicos tanto de las haciendas forales como del propio Ejecutivo vasco, que realizaron sus últimos pronósticos a mediados del pasado mes de octubre.

Una de las consecuencias de ingresar en 2020 un 9,8% menos que el año anterior se refiere a que la partida para afrontar el gasto público, que se ha disparado con la pandemia, contará con alrededor de 1.500 millones de euros.