- Los consejos de administración de BBVA y de Banco Sabadell se reunirán previsiblemente de forma extraordinaria a mediados de diciembre para decidir si dan luz verde a la operación de fusión entre ambas entidades, según el calendario tentativo de la operación.

Como es habitual en este tipo de acuerdos, las personas involucradas en las negociaciones trabajan con unos plazos marcados, aunque flexibles, por lo que los consejos no están todavía oficialmente convocados. Las entidades confirmaron que mantienen conversaciones en relación a una pote a principios de esta misma semana.

Ambos bancos han encargado la realización de una due diligence, proceso de auditoría profundo en virtud del cual se recaban y analizan los datos de cada una de las entidades financieras. Una vez finalice este paso, con todos los números sobre la mesa, los consejos deberán decidir si dan su visto bueno a la operación. En dicha cita podrían decidirse cuestiones clave como la propia ecuación de canje, la sede del grupo resultante, la composición del consejo de la nueva entidad o sus objetivos, entre otros aspectos.

De este modo, si los resultados que arroja la due diligence son positivos, los consejos podrían dar el pistoletazo de salida antes de Navidad a una operación que daría origen a un grupo con activos globales de 963.108 millones de euros (727.014 millones de BBVA y 236.094 de Sabadell), un total de 9.769 oficinas en las geografías en las que opera (7.565 de BBVA y 2.204 de Sabadell) y 148.028 empleados.

Solo en España, el banco fusionado tendría activos de 596.481 millones de euros (403.527 millones de BBVA y 192.954 millones de Sabadell), situándose inmediatamente por detrás de la nueva CaixaBank tras su fusión con Bankia (ambas entidades suman 625.115 millones de activos en España con datos de septiembre de 2020) y dejando a Santander en tercera posición.

963

Activos. La fusión entre el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria y el Sabadell daría lugar a un gigante con más de 963.100 millones de euros en activos.

La pugna por el mercado. Si la alianza llega a buen puerto, nacerá el segundo banco por tamaño del Estado tras Caixaban-Bankia, y dejaría al Santander en la tercer posición.