- Miles de daneses con una larga vida laboral podrán acogerse a una nueva jubilación anticipada con la que el Gobierno pretende premiar a personas con empleos de gran carga física, según un controvertido modelo que supone un giro simbólico frente a años de políticas de recortes de prestaciones y pensiones.

Un gesto de calado viniendo de uno de los denominados países frugales, un grupo liderado por Holanda, que presiona a los del Sur, entre ellos España, para que ajusten sus cuentas y, entre otras cuestiones, limiten el presupuesto de pensiones. En el actual contexto de la crisis las tensiones entre bloques se han disparado.

El plan presentado esta semana por la primera ministra socialdemócrata, Mette Frederiksen, responde a la principal promesa hecha antes de la campaña electoral de hace un año, que acabó con el regreso al poder de su partido un lustro después.

Pero la propuesta inicial es más modesta de lo insinuado en su día: serán necesarios como mínimo 47 años trabajados, lo que beneficia casi exclusivamente a trabajadores no cualificados y deja fuera a profesiones que exigen una educación superior corta.

El plan se basa en un modelo complejo que fija en 61 años la edad clave para hacer cálculos: quien tenga 42 años trabajados entonces, podrá jubilarse uno antes de la edad de jubilación (fijada en 68 para 2022); si son 43, dos años antes; y con 44, tres.