- La decisión de Félix Garciandia de poner a disposición su cargo ha dado la puntilla final a la gobernabilidad del Puerto de Pasaia, ya que los tres puestos de decisión más importantes, la Presidencia, la Dirección y la Jefatura de explotación, se encuentran vacantes o en funciones.
La primera plaza en quedar vacía fue la jefatura de explotación, dado que su responsable pertenece al grupo de ocho profesionales ejecutivos fuera de convenio que presentaron la denuncia contra el presidente ante la Comisión de Ética Pública del Gobierno Vasco, y entre los cuatro de ellos que posteriormente han abandonado la Autoridad Portuaria de Pasaia.
La reciente dimisión del director, César Salvador, no se ha hecho efectiva inmediatamente, pero en los próximos dos o tres meses el directivo saldrá de su puesto. Por último, la permanencia de Félix Garciandia como presidente se encuentra en entredicho, a la espera de la decisión que adopte el departamento vasco de Infraestructuras.
El vacío en la cúpula organizativa es un asunto que exige una rápida solución, teniendo en cuenta la difícil coyuntura a la que se enfrenta la dársena guipuzcoana motivada por la crisis del coronavirus.
