- Las asociaciones Adisbask y Adisalava, que representan al sector de distribución a hostelería y restauración en Euskadi, criticaron ayer la actitud del Gobierno Vasco ya que, según afirmaron, no les reconoce la causa de fuerza mayor en los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) que ha presentado el sector en Euskadi.

En un comunicado, el presidente de Adisbask, Josean Sancho, explicó que las empresas vascas de distribución a hostelería y restauración (lo que se conoce como Horeca), “pierden el 95% de su actividad por el cierre de la hostelería”.

“Es un sector sin clientes: la totalidad de sus clientes de hostelería están cerrados, y solo han realizado unos servicios mínimos aquellos distribuidores que suministran a centros hospitalarios, gasolineras y a las pequeñas tiendas de alimentación que permanecen abiertas”, según detalló el presidente de Adisbask.

Por ello, no entiende la no admisión del carácter de fuerza mayor en los procedimientos de los ERTE presentados en el País Vasco. Esta decisión puede suponer, según esta patronal, el cierre de más de 200 empresas de distribución y la pérdida de más 3.500 puestos de trabajo directos.

Además, afirmó Sancho, “sorprende el agravio comparativo que supone en estos graves momentos para las empresas de distribución en Euskadi el hecho de que sea la única comunidad autónoma que ha emitido resoluciones no aceptando la fuerza mayor en la petición de ERTE para el sector”.

Las asociaciones Adisbask y Adisalava aseguraron que “hay ya muchas resoluciones aceptando la causa de fuerza mayor en los ERTE de empresas del sector” en otras comunidades como Catalunya, Galicia, Castilla y León, Castilla- La Mancha y Andalucía “e incluso, debido a la gran acumulación de peticiones de ERTE, en muchos casos está pasando el plazo de 5 días sin contestación, lo que supone su admisión por silencio administrativo”.

Josean Sancho concluyó que “la rapidez del procedimiento de suspensión de contratos por causa de fuerza mayor es la clave para poder adaptarnos al nivel de actividad sin realizar despidos y permitir a las empresas de distribución su supervivencia para cuando se vuelva a la normalidad”.