donostia - Las 34 organizaciones asociadas a la Asociación Clúster del Papel de Euskadi facturaron 1.182 millones de euros en 2018, lo que supone un 5,9% respecto al año anterior. De esa cifra, 612 millones de euros (+1,6%) fueron exportaciones. Asimismo, invirtieron 41 millones de euros y generaron un empleo directo de 2.338 personas (+8,4%). La producción de pasta y papel fue de 1.329.000 toneladas, lo que supone un descenso del 2,6%.

Estos resultados se alcanzaron en un contexto de mercado que “fue empeorando paulatinamente a lo largo del año”. Además, la variación interanual de los resultados “ha estado condicionada por la evolución del número de socios del Clúster y de su perfil en 2018”. Estos datos, así como los retos a los que se enfrentan en 2019 las empresas asociadas, han sido expuestos este jueves por el presidente y el gerente de la Asociación, Senén Amunarriz e Iñaki Ugarte, respectivamente, en su 22ª Asamblea General.

Los responsables del Clúster señalaron que, en los últimos años, la demanda de los papeles relacionados con el packaging ha crecido “de forma importante” mientras caía el consumo, y la producción, de papeles gráficos. Este proceso de sustitución “ha provocado numerosos cierres o paradas de máquinas de papeles gráficos y la ampliación de capacidades en el mundo del packaging gracias a importantes inversiones”.

Sin embargo, las inversiones “han incrementado sustancialmente el volumen de la oferta de los papeles para packaging, incluso por encima de la demanda, la cual ha retrocedido en los últimos meses, lo que deteriora las expectativas de negocio a corto y medio plazo para este tipo de papeles”.

2019 se aborda por las empresas asociadas con la duda del impacto que tendrán en las carteras de pedidos y en los precios de venta “el exceso de oferta generado, a nivel global y sobre todo a nivel europeo, en todo tipo de papeles” y también “la llegada de papeles producidos en entornos más competitivos”.

A pesar de las incertidumbres comerciales y la contención del crecimiento europeo y mundial, el sector “apuesta con firmeza por el futuro y buena prueba de ello son los 350 millones de euros invertidos en los últimos 10 años por los socios del Clúster”. Las inversiones realizadas en 2018 y previstas para 2019 por los miembros del clúster tienen como objetivo “nuevos productos y mercados, industria 4.0. y productividad, así como continuar con la minimización del impacto medioambiental”. Uno de los aspectos destacados es que la cadena de valor de la bioindustria forestal papelera “trabaja en la búsqueda de los materiales del futuro que puedan sustituir a los plásticos y a otros productos fabricados a partir de materias primas fósiles”.

En cuanto al empleo, señalaron que las empresas en activo contratan personal cualificado todos los años manteniendo un nivel de contratos fijos del 92% y “un salario medio bruto para una jornada a tiempo completo un 44% superior al del Estado”.

Huelga en Gipuzkoa En el marco de la asamblea, el clúster expresó su “honda preocupación” por el desarrollo de la negociación del convenio de pasta y papel en Gipuzkoa (afecta a siete empresas asociadas) y la huelga de 16 días convocada por lo sindicatos y que se inició el pasado miércoles.

Por su parte, LAB cifró en un 90% el seguimiento de la segunda jornada de huelga convocada en el papel de Gipuzkoa y afirmó que “la parada en la producción ha sido total”.

Esta centran sindical aseguró en un comunicado que, tras estos dos días de paro, ha quedado claro que los “trabajadores quieren un convenio digno que reparta la riqueza generada en el sector”.

LAB opinó que “Adegi debe tomar nota de lo expresado por los trabajadores, dejar a un lado su actitud inmovilista y abordar, de una vez, una negociación real”. Las dos próximas jornadas de huelga están señaladas para los días 26 y 27 de junio.