donostia - El ingeniero industrial y experto en economía Félix Garciandia Telleria será nombrado nuevo presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia en sustitución de Ricardo Peña, que anunció su jubilación. El Consejo de Gobierno del Ejecutivo vasco aprobó ayer su designación, que se hará efectiva en los próximos días.

Garciandia es doctor en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Deusto e ingeniero industrial por The Open University del Reino Unido, y durante su trayectoria profesional ha desempeñado diversos cargos tanto en el ámbito privado como en el público.

El próximo presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia tiene experiencia en la empresa privada, donde trabajó en firmas como Bellota Herramientas, Viscofan o Zubialde de Aizarnazabal. Su currículo también recoge su época como técnico de valoración de fondos de inversión en Kutxagest.

Respecto a su trabajo en instituciones públicas, Félix Garciandia Telleria ha sido gerente de la Agencia para la Renovación Urbana de la Bahía de Pasaia y jefe de proyecto en Sprilur, donde ejercía actualmente su trabajo.

En su nueva etapa profesional, el próximo presidente tendrá que afrontar una difícil situación en el Puerto de Pasaia, que cerró el pasado ejercicio con malos resultados a los que tendrá que dar la vuelta para situar a la dársena en los buenos niveles que presentaba hace unos años.

pérdidas Así, la actividad portuaria guipuzcoana se redujo un 13,9% en el ejercicio correspondiente a 2017, un porcentaje de disminución incluso superior al que se registró al cierre de 2016, del 8,9% de pérdidas, en un año considerado malo.

Las seis toneladas de mercancías que el Puerto de Pasaia llegó a gestionar en sus mejores años se redujeron el pasado año a la mitad, según el informe que publicó hace unos días la propia Autoridad Portuaria de Pasaia. Son cifras que remiten a la temporada donde la crisis económica azotó de manera más fuerte, y de la que parece que el recinto portuario guipuzcoano no consigue desprenderse.

El significativo descenso de la chatarra, que con respecto a 2016 bajó más del 60%, es uno de los factores que explican este negativo comportamiento pero no el único. Hasta el pasado ejercicio, el vacío dejado por la chatarra fue cubierto por los productos siderúrgicos, de mayor calidad y con Arcelor de Olaberria como principal emisor. Sin embargo, esta mercancía también sufrió un descenso de diez puntos porcentuales en el ejercicio que acaba de cerrarse.

Estas caídas han sido más pronunciadas que la protagonizada por el sector automovilístico, mientras que los ascensos de otros materiales como el cemento o la madera no han conseguido paliar la pronunciada bajada, sobre todo porque su presencia en el cómputo total del tráfico de mercancías del Puerto de Pasaia aún no es significativa. - N.G.