Tras varias semanas de trabajos, el circuito de saltos en bicicleta, denominado también pump track, se reestrenó en la mañana de ayer con nuevo pavimento. Los aficionados a esta práctica, así como los skaters, acudieron a conocer la instalación reformada, que antes era de tierra y ahora tiene el piso de asfalto.

Otro deportista en el pump track.

A pesar de que el tiempo no era muy seguro, los usuarios acudieron a probar la nueva instalación, que es la más larga de las existentes en Euskadi. Recientemente se ha abierto otra pista de bicis similar en Irun.

Cartel informativo de la instalación.

El circuito cuenta con tres recorridos de distinta longitud y dificultad. El primero de ellos tiene 32 metros y dos peraltes y se reserva para principiantes. El segundo, de 58 metros y dos peraltes, es para aficionados de nivel medio. El tercero, finalmente, tiene 133 metros y cinco peraltes y permite desplazarse a gran velocidad.

El circuito de saltos de Arrobitxulo se inauguró en 2016. Con el tiempo y el deterioro de la pista, Donostia Kirola optó por abordar una reforma total de la instalación, que ha durado varias semanas y ha costado 125.000 euros.