El Consejo de Ministros autorizó este martes la financiación prevista del intercambiador de Riberas de Loiola, una nueva estación que permitirá pasar del Topo a Cercanías de Renfe, y viceversa, y supondrá una inversión cercana a los 35,9 millones de euros (sin IVA). La suma se financiará a tercios entre el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, a través de Adif, el Gobierno Vasco, por medio de ETS, y la Diputación Foral de Gipuzkoa. 

El convenio que firmarán las tres partes incluye las condiciones para la definición, ejecución y financiación en la intersección a distinto nivel de la línea de C1 de Cercanías de Adif y la del Topo a su paso por Riberas de Loiola.

La redacción de los estudios y proyectos de construcción de la estación, así como la obtención de los suelos necesarios para su ejecución, quedan incluidos en el convenio, que contempla la ejecución de dos proyectos. El primero abarca la ejecución del edificio del intercambiador y del resto de las instalaciones de ETS, mientras que el segundo se centra en las obras del vestíbulo junto a avenida de Barcelona, las vías, su cobertura y los andenes de Adif.

Según el acuerdo, ETS licitará y adjudicará los servicios para la redacción de los proyectos 1 y 2 de construcción. También licitará y ejecutará las obras de construcción y contratos de consultoría y asistencia necesarios. Adif colaborará con ETS en la elaboración de los proyectos construcción. Según los planes previstos, la obra del intercambiador comenzará en 2025 y no estará finalizada hasta 2028. 

La candidata socialista a la Alcaldía de Donostia, Marisol Garmendia, señaló ayer que la autorización de la financiación “es un paso adelante decisivo en la apuesta por la movilidad sostenible y la mejora del transporte público, que han sido siempre señas de identidad socialista”.