El proyecto de bidegorri entre el barrio donostiarra de Bidebieta y el distrito pasaitarra de Trintxerpe se actualizará de nuevo hoy, en este caso a causa de los nuevos precios derivados de la inflación. El proyecto aprobado con un montante de casi 414.000 euros (IVA incluido) pasará a costar un 26% más, es decir, 513.360 euros, y recibirá luz verde de la Junta de Gobierno. Este bidegorri es uno de los reclamados por Kalapie para favorecer el uso de la bicicleta y aumentar así el 6% de trayectos con este vehículo.

La longitud del bidegorri es de 455 metros y conecta las inmediaciones de la calle Azkuene, donde da comienzo el municipio de Pasaia, con el interior del barrio de Bidebieta, en la rotonda de Juan XXIII. La anchura será de 2,5 metros y la obra durará cuatro meses.

Empezando desde Azkuene, el carril ciclista circulará con una leve pendiente hasta la rotonda de Ancla, frente a la plaza Nornahi y luego se hará más empinado. En el primer tramo se situará en la zona de la calzada reservada ahora para paradas de autobús, junto a la conexión con Herrera, justo frente a la zona del nuevo Eroski.

A la altura de supermercado, el bidegorri se trasladará a la mitad de la calzada y seguirá hasta llegar al paso de peatones más cercano a la calle Juan Carlos Guerra. En total, serán 160 metros de recorrido recto con protecciones a ambos lados.

El carril se cambiará hacia la zona de aparcamiento de la avenida de Pasai San Pedro y circulará por donde ahora están los contenedores. Después llegará a la rotonda del Ancla, donde ganará espacio para a costa de eliminar la zona ajardinada y reducir la sección del vial de la glorieta.

En la actualidad, y aunque no está permitido, el arcén de la rotonda es utilizado por los coches para estacionar. Con la construcción del bidegorri esta práctica dejará de ser posible. La solución ha sido consensuada con el Departamento de Infraestructuras Viarias de la Diputación, responsable de esta rotonda. En este punto, el bidegorri quedará algo más bajo que la calzada, ya que la zona ajardinada sirve para absorber el desnivel entre la rotonda y la acera. Por ello, se construirá un pequeño murete para salvar la diferencia de altura y proteger el bidegorri.

Zona de la rotonda del Ancla, donde el carril ciclista se ‘comerá’ el arcen y la zona ajardinada. Ruben Plaza

Al llegar a las denominadas casas de Lasa el carril bici seguirá por la actual zona de acera, no se eliminarán los jardines pero se desplazarán unos bancos. Más, delante, frente al BM, el carril bici tomará espacio en la zona de jardineras y se creará otro murete con barandilla de protección. Después, discurrirá por detrás de la marquesina del autobús y es posible que afecte a unos árboles. Finalmente, en el cruce de la calle Colombine, se meterá por la actual zona peatonal hasta Juan XXIII.

Los preparativos para llevar a cabo la obra de conexión ciclista de Bidebieta con Pasai San Pedro ha sufrido distintos contratiempos, entre ellos, la pandemia. En junio de hace tres años, el Ayuntamiento de Donostia encargó la redacción del proyecto a Endara Ingenieros, que lo presentó en noviembre. Sin embargo, la apertura de un nuevo Eroski en la avenida de Pasai San Pedro, así como las dificultades para obtener terrenos propiedad de la Autoridad Portuaria, hizo necesario llevar a cabo una modificación del proyecto. Ya reformado, fue entregado de nuevo en noviembre 2021 y aprobado en diciembre, con una previsión de coste de 413.985 euros. Ahora, sube de precio para atraer a las empresas.