or la cabeza de la escritora donostiarra Eva Garner no pasaba hasta hace muy poco la posibilidad de publicar un poemario. No fue hasta la llegada de la pandemia y, sobre todo, tras llevar a cabo una serie de talleres de escritura en los que comprobó la buena aceptación de sus textos cuando decidió dar el paso. El resultado de ese “salto a la aventura” es Cinco estaciones, un libro autopublicado que reúne poemas, reflexiones y haikus que “hablan de emociones y elementos de la naturaleza” inspirados en varios puntos emblemáticos de la capital guipuzcoana.

“Es muy complicado definir un poemario, pero lo que yo he intentado es entrelazar poemas con elementos de la naturaleza”, explica Garner sobre un debut literario que se ha hecho de rogar. Durante años, esta donostiarra escribió y escribió poemas animada por diferentes talleres impartidos por autores como Luisa Etxenike, Itziar Sistiaga y Sihara Nuño que siempre “quedaban en el cajón”. No obstante, con la llegada de la pandemia decidió sacarlos a la luz. “Hice un taller online durante el confinamiento y entonces me di cuenta, al compartirlos con el resto de compañeros, que podía hacer un libro”, cuenta.

Es ahí cuando comenzó el trabajo de recopilación, cayendo en la cuenta de que se podían dividir los escritos en cinco estaciones diferentes. “Todo el mundo me pregunta que cómo que cinco, pero es que a las habituales he añadido la pandemia, aunque cada vez me gusta nombrarla menos”, revela, añadiendo que los textos incluidos en este apartado se crearon durante el mencionado taller y bajo el espíritu del confinamiento.

A pesar de esa situación de encierro, todas, incluida esa quinta estación, son un canto a la naturaleza. “Es un recorrido físico por lugares de Donostia que todos conocemos. De aquellas sensaciones que nos puede dar un parque, unos árboles, las gaviotas... Estoy muy contenta porque es algo que la gente me ha matizado mucho cuando lo han leído”, indica la escritora. Buena parte de esos lugares quedan reflejados en la ilustración incluida en la portada del libro, como el Peine del Viento, el parque Cristina Enea o la estación de tren con su icónica tejavana roja.

pasión por los haikus

Más allá de los poemas, en Cinco estaciones también hay espacio para reflexiones y haikus, un tipo de poesía japonesa que debe hacerse con pocos versos. “Los más puritanos dicen que como condición deben hablar de una estación y en todos los míos no se cumple”, apunta Garner, quien no recuerda cómo se interesó por ellos. “Un día probé y me encantaron. Son tan resumidos que en ocasiones tienes incluso que obviar el verbo, lo que es un desafío”, apunta.

La autora confiesa que, hasta hace poco tiempo, no había sido una lectora habitual de poesía. Algo a lo que le ha puesto remedio con referentes como Matsuo Bash?o, Mario Benedetti, Joan Margarit y Karmelo Iribarren, del que afirma ser una fiel seguidora. Tanto que ha comenzado un nuevo taller bajo sus órdenes. A ellos hay que sumarle su inclinación por Paul Auster y Haruki Murakami en el campo de la ficción.

Además de poesía, la autora también escribe diarios. “Me rompí el tendón de Aquiles bailando y empece lo que llamé Diario de una escayola al que le siguió Diario de una recuperación y me lo pasé en grande. Desde entonces tengo un diario que, aunque no escribo todos los días, me gusta mantener”, explica, al tiempo que apunta que le encantaría escribir “una novela de autoficción”. “Quien sabe, nunca pensé en hacer un poemario y mira”, apunta entre risas.

Cinco estaciones está disponibles en numerosas librerías de Gipuzkoa como Noski!, Garoa, Lagun y Garazi y en Fnac de Donostia y Bilbao. Además, se puede adquirir a través de la cuenta de Instagram de la autora. Tras presentar el libro en diferentes casas de cultura el pasado año, retomará la promoción a partir del mes que viene estando el 12 de marzo en la librería Zubieta de la capital guipuzcoana.