donostia - Los vecinos de la zona de Marrutxipi han mostrado su preocupación por los efectos que tendrá en su entorno la creación del pinchazo o nuevo acceso de la Variante, presentado por la Diputación y el Ayuntamiento en octubre. Denuncian que desconocen los detalles del proyecto y que no han sido informados, pero que temen una obra que creará “una trinchera en la zona, un paso subterráneo y túneles y que eliminará plazas de aparcamiento”. En un escrito, sospechan que “una zona tranquila vaya a ser transformada en un infierno”.

Varios vecinos del barrio presenciaron ayer en el Pleno el debate en torno a este asunto a partir de una moción presentada por EH Bildu, en la que se solicitaba al Gobierno municipal que informara del proyecto a los vecinos en un plazo de dos meses para que pudieran hacer aportaciones. La concejala de Movilidad, Pilar Arana, afirmó que tiene previsto ir a Marrutxipi a explicar la propuesta “cuando haya algo concreto que enseñar”, aunque consideró inadmisible que el texto de EH Bildu incidiera en que acuda a ese encuentro “con honestidad”. “No admito que se diga que hasta ahora no he actuado con honestidad; en todos los encuentros que he tenido con vecinos sobre distintos proyectos he sido sincera y honesta”, afirmó, por lo que el Gobierno municipal votó en contra.

El concejal de EH Bildu Josu Ruiz criticó que “ya había algo que enseñar” cuando se convocó la rueda de prensa para explicar el proyecto y criticó que el Gobierno municipal no ha cumplido sus compromisos sobre la eliminación de Carlos I y la revisión de los accesos de la Variante. Arana insistió en que la comisión entre el Ayuntamiento y la Diputación ha dado sus frutos, en referencia a los proyectos de Marrutxipi y el acceso al Polígono 27 desde Astigarraga, “los primeros pasos para eliminar Carlos I”: “Son dos soluciones muy buenas, seguro”.