Donostia - Los vecinos de Maldatxo Bidea, en el barrio de Egia, han remitido al Ayuntamiento un escrito avalado por 144 firmas para que revierta los resultados de unas obras que definen como “despropósito” y acometa las necesarias reformas en el muro que limita con la franja de terreno que fue cedida al Consistorio por el convento de San Francisco hace diez años.
El Ayuntamiento de Donostia, después de que EH Bildu presentara una moción para que se acometiera la reforma del citado muro en enero de este año, procedió a llevar a cabo obras en el mismo cuyo resultado, según los vecinos, dista mucho de ser el adecuado.
En su escrito indican que las intervenciones se remataron “de forma improvisada y caótica, sin un proyecto previo”, lo que provocó la ejecución de “un derribo desordenado y masivo” que dejó huella en forma de numerosas grietas que “ni se reparan ni se sellan”. Además, añaden, la altura del citado murete no se igualó y continúa “a distintos niveles” y con la parte superior sin rematar. A consecuencia de las obras efectuadas, se indica en la denuncia, piedras del muro cayeron en la calzada causando diversos daños que “impiden la correcta canalización del agua pluvial”.
EH Bildu volvió a llevar el tema al pleno, instando al Gobierno a que procediera a realizar las obras “adecuadamente” y a que se pusiera en contacto con los vecinos con el objeto de conocer su parecer. De momento, estos califican las obras realizadas como “burla”.
Entre las intervenciones que se reclaman en el escrito, además de la rehabilitación del muro, se halla “la construcción de una acera de forma urgente” que garantice la seguridad de los peatones que, en la actualidad, deben de circular por la calzada en un terreno con pronunciada pendiente y mala visibilidad.
