Una plaza sin cubierta

La plaza Blas de Otero, junto al paseo de Duque de Mandas, no tendrá finalmente una zona cubierta tras las quejas presentadas por los residentes en la zona, que presentaron cerca de 200 firmas al Ayuntamiento en contra de la colocación de una cobertura en parte de la plaza. La instalación de una zona tapada surgió en los dos talleres participativos que se desarrollaron a finales de marzo, impulsados por el anterior gobierno municipal, y a los que asistieron una treintena de personas cada día, así como representantes de varias asociaciones.

Sin embargo, el proyecto de reforma de la plaza no llegó a ser definitivamente encargado y, tras el cambio de gobierno, algunos vecinos de los bloques de Duque de Mandas que dan a la plaza iniciaron una campaña de recogida de firmas en contra de la instalación, por considerar, principalmente, que podría convertirse un punto oscuro y peligroso por las noches.

Finalmente, el “espacio multifuncional cubierto” que había sido decidido en los talleres fue descartado por el nuevo gobierno municipal, aunque no el resto de propuestas principales, como que se cree una zona de estancia, árboles y un espacio deportivo-recreativo.

Así, el proyecto de urbanización fue aprobado por la junta de gobierno a finales del pasado mes de agosto y comenzará a ejecutarse a principios de año, tras el preceptivo concurso de obras. Una vez iniciados los trabajos serán necesario cinco meses para finalizar el nuevo entorno. La plaza, además, quedará conectada por escaleras con la de Nestor Basterretxea, junto a Tabakalera.