Josu Franco, de la Clínica del Pilar; Mamen Moneo, del Sindicato de Técnicos de Enfermería; Juan José Calvo, de la Asociación Vasca de Geriatría y Gerontología; Pilar Marco Garde, del Hospital Universitario Donostia, y María Dolores Olaizola y Amaia Goena, por su labor en la atracción del Congreso Europeo de Ortodoncistas, fueron designados ayer embajadores turísticos en el Palacio de Congresos del Kursaal. El nombramiento fue una manera simbólica de reconocer la labor que estos profesionales han realizado para atraer convenciones a Donostia.

El programa Enbaxadore, promovido por el Kursaal y San Sebastián Turismo, nació el pasado año y reúne a los profesionales más destacados del territorio que logran atraer congresos para que Donostia sea conocida como ciudad de la ciencia y el conocimiento.

Los premiados son profesionales que, desde sus áreas de trabajo, consiguen la contratación de congresos, lo que dinamiza notablemente la actividad económica de la ciudad. De hecho, en los últimos cinco años, los 570 congresos celebrados en la capital guipuzcoana, a los que han acudido más de 160.000 personas, han generado un impacto de alrededor de 95 millones de euros.

Por ello, el alcalde, Juan Karlos Izagirre, quiso a agradecer el trabajo desinteresado que llevan a cabo estas personas "en la sombra". "Han convertido a la ciudad de Donostia en una residencia internacional donde se reflexiona sobre temas con mucha trascendencia; han conseguido expandir el turismo y han generado un gran actividad económica", reconoció el alcalde.

El primer edil donostiarra, además, aprovechó el acto para recordar que la propuesta de ampliar el Kursaal para acoger congresos de mayores dimensiones, por ahora en suspenso, sigue en marcha. Asimismo, reprochó el reparto de congresos de la Agencia Vasca de Turismo Basquetour: "Debería mantener un mayor equilibrio territorial, ya que Donostia es una ciudad reconocida y apreciada por todos los congresistas que acuden a ella", sentenció Izagirre.