Donostia. El caserío Munto de Aiete, que tiene sus orígenes en el siglo XVI, podría ser finalmente derribado, según informaron anteayer a representantes vecinales los concejales de Participación, Axier Jaka, y de Urbanismo, Ricardo Burutaran. Los ediles explicaron que, a pesar de que incluyeron el pasado año en el Presupuesto un millón de euros para reparar el caserío -que sufre desprendimientos-, no han alcanzado acuerdos con los grupos de la oposición para evitar la desaparición del inmueble, que permanece sin uso.
El caserío Munto es uno de los 60 que tenían actividad agropecuaria en el siglo pasado y ejerció hasta su cierre como merendero. Entre su historia destaca que sobrevivió a las guerras carlistas y fue hospital del ejército inglés durante el asedio de la primera de estas guerras.
En el año 2008 el Ayuntamiento le retiró la catalogación, por lo que su conservación dejó de ser obligatoria. Dos años después, la empresa que lo compró presentó el proyecto de derribo, pero un grupo de vecinos inició una recogida de firmas para evitarlo.
En este tiempo, el deterioro del caserío se ha mantenido. En septiembre de 2011 se produjo un desprendimiento de piedras y el Ayuntamiento encargó un estudio técnico para analizar su estado, informe que repitió en 2012. Tras el último desprendimiento el 25 de enero, los propietarios han anunciado su intención de derribarlo, ya que en caso de caerse tendría que asumir la responsabilidad civil, según explicaron los corporativos Jaka y Burutaran.
Burutaran calificó ayer de "negligente, descuidado e irresponsable" al Gobierno municipal dirigido por Odón Elorza y añadió que "la inacción del Gobierno anterior ha permitido que un edificio protegido se deteriorara sin tomar decisiones y sin dictar órdenes de ejecutar la restauración del caserío".
Los vecinos que asistieron a la reunión del martes propusieron que, en caso de que finalmente se derribe, se instale algún elemento que recuerde la importancia histórica de este edificio en la plaza que se proyecta en el solar que ocupa en la actualidad, una petición que fue asumida por los representantes de Bildu.