LAS fotos de miles de niños de distintas generaciones vestidos con trajes de baserritarras, con trajes de tamborreros, de caldereros, de comunión y disfrazados; fotos de fiestas, de celebraciones... En pocas familias antiguotarras faltará alguna instantánea recogida por las cámaras de Foto Miki o revelada en este establecimiento.

Tras más de 50 años de vida desde que se instaló al principio de la calle Matía, este negocio de la familia Iturriza será homenajeado el día 12 por los antiguotarras: será en el marco del 32º Reencuentro Antiguotarra organizado en la sociedad Baso Etxea por Patxatxa Taldea, que cada año elige a un vecino, grupo o establecimiento del barrio para rendirle un pequeño homenaje.

"Nos hizo ilusión que se acordaran de nosotros. Siempre estamos detrás de la cámara y ahí pareces invisible; por eso, que se den cuenta de que estás ahí es de agradecer", cuenta Ana Iturriza. Fue su padre Enrique, más conocido como Miki, quien abrió el negocio que ahora, con él ya retirado, regenta ella.

cambios

Sin olor a químicos

Aunque los tiempos han cambiado, mantiene la forma de trabajar de su padre que, en su época, empezó por iniciativa propia a inmortalizar los festejos y celebraciones del barrio. Después, ponía las fotos a disposición de los antiguotarras. "Ahora parece que no tiene tanto sentido porque todos tienen una cámara, pero antes no. De todas formas, seguimos funcionando así: sacamos las fotos, hacemos un album y los clientes pueden comprar las fotos que les gusten", explica Ana Iturriza.

Otra de las cosas que ha cambiado es, precisamente, el olor de la tienda. "Se echa de menos el olor a químicos de los reveladores", cuenta Iturriza, una vez que la tecnología digital se ha impuesto en el negocio.

A lo largo de estos años el establecimiento ha vivido momentos duros y, precisamente, la irrupción y popularización de las cámaras digitales fue uno de ellos. Pero poco a poco se ha ido adaptando a los nuevos tiempos y ha sabido continuar en su local de la calle Matía, siendo testigo de los acontecimientos y de la evolución de las familias del barrio.

Así, a través de todas las fotos sacadas o reveladas a lo largo de este más de medio siglo de historia, Foto Miki ha ido completando la historia del barrio en imágenes y, también, la de las familias antiguotarras. "Las cosas van cambiando, pero esto sigue siendo un poco como un pueblo", confiesa Iturriza.

Con algunas de esas familias se encontrarán el día 12 en la comida organizada en Baso Etxea. Ana espera que también su padre se anime a acudir a la celebración. "Fue él quien empezó con el negocio y quien podrá contar algunas batallitas de los inicios", bromea su hija.