POR primera vez desde que Donostia cuenta con luces de Navidad, el barrio de Martutene fue el escenario desde el que se encendió el interruptor de la decoración luminosa para toda la ciudad. Aunque no es uno de los barrios más poblados de la capital guipuzcoana, decenas de chavales se acercaron hasta el parque situado junto a la gasolinera, en el que tuvo lugar el encendido.

Los payasos Gari, Lontxo y Joselontxo, que actuaron posteriormente en la ikastola, amenizaron el acto, y ayudaron a la niña elegida para el acto a dar al gran interruptor de encendido. Tras su acción, se iluminaron las bombillas del parque, así como muchas otras de la ciudad, aunque todas las decoraciones lumínicas no funcionarán hasta el día 15.

El evento fue corto y, menos mal, porque al minuto de llevarse a cabo hizo acto la indeseada lluvia, que chafó la diversión al aire libre, aunque pudo seguir en el patio cubierto de la ikastola.

En el acto estuvieron presentes operarios municipales responsables de la electricidad, así como algunos corporativos. Entre ellos, el portavoz de Bildu, Josu Ruiz, y el concejal del PNV, Eneko Goia.

ahorro

Hasta el día 7

Este año la iluminación navideña se extenderá hasta el día 7 de enero, en horario de 17.30 a 23.00 horas. A causa de la necesidad de ahorrar en electricidad, los motivos luminosos que se cuelgan de las calles utilizan nuevas tecnologías, como las bombillas led.

En total, se han instalado 250 arcos en las calles. También se han colocado otros motivos navideños con distintas formas y colores por todos los barrios aunque, especialmente, en las zonas más comerciales. De hecho, comerciantes de la calle San Marcial, Gros y la Parte Vieja colaboran económicamente para sufragar el coste de esta decoración especial.