Concluye la peatonalización de dos nuevos tramos de la calle Arrasate

donostia. La calle Arrasate se reabrió al público ayer tras completar los trabajos de peatonalización. Las obras han transformado el tramo que va desde la calle Bergara hasta la calle Hondarribia. De este modo, la práctica totalidad de la calle es ya para el peatón. Solo el último bloque hasta la calle Etxaide, el más cercano al río, y el que conecta con Easo permanecerán abiertos al tráfico.

Según informaron fuentes municipales, la urbanización de la calle Arrasate ha seguido "una sección similar a la de la calle San Marcial", con aceras a ambos lados de tres metros con arbolado, una calzada de cuatro metros para bicicletas y tránsitos de reparto de mercancías y dos metros para el estacionamiento de vehículos por la noche.

Los pavimentos de la calle han quedado a la misma cota, de modo que se facilita el tránsito peatonal. La zona de baldosa hexagonal donostiarra (las aceras) y la calzada se han separado por franjas de adoquín calizo de 30 centímetros de anchura, formando cenefas.

Las obras para peatonalizar este nuevo tramo de hasta 120 metros de longitud de la calle Arrasate arrancaron en verano y, tras varios meses de incómodas obras, los vecinos y el resto de donostiarras que acuden al Centro han recuperado un nuevo espacio peatonal, "que sin duda será muy positivo para el comercio del entorno", en opinión del concejal de Fomento, Josu Ruiz.

Por su parte, la concejala de Obras y Servicios, Nora Galparsoro, afirmó también que "los vecinos de esta calle ganarán en calidad de vida, ya que el paso de vehículos, con la contaminación ambiental y acústica que ello conlleva, será mínima".

centro peatonal Los trabajos han supuesto una inversión de 460.000 euros y la intervención se enmarca en la política municipal de ceder espacio de vehículos motorizados a los viandantes donostiarras. En las inmediaciones de la calle Arrasate hay ya otras vías peatonales.

Por un lado, se encuentran los ejes que llevan hasta la avenida de la Libertad, es decir, las calles Loiola y Getaria. Esta última, además, enlaza con la calle Txurruka, con la plaza Gipuzkoa y con la calle Elkano, permitiendo al peatón llegar hasta el Boulevard. Además, la calle San Marcial es otra de las que fueron peatonalizadas hace un tiempo y que permite la conexión desde la zona del río Urumea hasta la calle Urbieta.