Donostia. El delegado de Hacienda del Ayuntamiento de Donostia, Jabi Vitoria, anunció ayer la decisión del Gobierno de Bildu de bloquear créditos por valor de 45 millones de euros, ya solicitados, y no abordar las inversiones correspondientes hasta contar con los ingresos que permitan equilibrar el presupuesto. "No vamos a maquillar ni engañar", dijo el responsable de las finanzas donostiarras, que añadió: "No queremos llegar a fin de año con un agujero".

El responsable municipal rechazó detallar qué inversiones previstas y no iniciadas quedarán paralizadas y manifestó que serán determinadas después de que el alcalde, Juan Karlos Izagirre, se reúna con los distintos directores de los departamentos del Ayuntamiento. En total, el documento presupuestario de 2011 preveía ingresos de capital por valor de 60 millones de euros, de los que el pasado mes de junio solo se había conseguido una cuarta parte. Tres meses después, la situación sigue igual.

El Ayuntamiento no ha logrado ingresar ni los 18,5 millones presupuestados por la venta de parcelas residenciales en zonas como Atotxa Erreka, Aldunaene, Iyola e Illarra, ni tampoco los tres millones de euros por el anunciado convenio con el Gobierno Vasco para construir viviendas en Txomin Enea. Tampoco el millón y medio de euros por la gestión del hotel previsto en Hydra, cuyo concurso quedó desierto. Para el representante de Bildu, estos ingresos no eran realistas ya que se basaban en actuaciones urbanísticas. "Si hubieran sido hechos hace tres años, aún tendría una disculpa, pero son presupuestos aprobados hace siete meses, lo cual es una irresponsabilidad porque la crisis del ladrillo ya estaba implantada", subrayó.

recaudación A este descenso de fondos se une la bajada de la recaudación en Gipuzkoa, que también tendrá efectos sobre las arcas municipales, que se nutren en gran medida de la aportación foral. Esta supone el 45% de los ingresos corrientes del Consistorio donostiarra.

El responsable de las finanzas de la capital guipuzcoana manifestó que las cuentas aprobadas el pasado mes de febrero por el Gobierno liderado por Odón Elorza, en coalición con Aralar y Alternatiba, constituyen un documento "ficticio y ajeno a la realidad". Asimismo, señaló que la decisión de bloquear los créditos obedece a que las previsiones "tal y como están, son muy difíciles de cumplir". "Mantener el equilibrio financiero nos obliga a trabajar y a no crear nuevos proyectos ficticios que ejerzan como cortinas de humo", añadió.

Por otra parte, Vitoria explicó que la situación es menos grave en los ingresos y gastos corrientes. Por ejemplo, bajará el gasto del Ayuntamiento en agua y saneamiento por el descenso del consumo y también el gasto por la OTA, ya que la aplicación del nuevo contrato se ha retrasado. También descenderán algunos otros desembolsos, como, por ejemplo, la supresión de trece puestos de escolta en la Guardia Municipal, así como en los sueldos de los miembros del Gobierno local, que se redujeron un 3%. Esta bajada es una reducción que afecta mínimamente al presupuesto y que también abarca a los portavoces de los grupos de la oposición, aunque no al resto de ediles.

También descenderán otros ingresos, como por ejemplo, el derivado del impuesto de vehículos ya que, según el delegado de Hacienda, "se producen menos altas por la crisis".