Donostia. Los 96 vecinos de Rutilita, una comunidad de ocho portales que se sitúa en el solar que antiguamente ocupó la fábrica del mismo nombre, en el barrio de Herrera, tendrán en breve acceso a un nuevo ascensor que les comunicará directamente con la plaza de San Luis, en la zona baja del barrio. De este modo, podrán salvar las escaleras que irremediablemente se veían obligados a bajar para salir de su urbanización, una vecindad rodeada por la carretera que sube a Altza -paseo de Herrera-, las empinadas escaleras de la calzada de San Ignacio y las vías de Renfe y el nuevo vial de Txingurri que tanta polémica suscitó en la zona.

Con este nuevo acceso, se da una solución a las protestas de esta comunidad de vecinos, que llevaba meses reclamando una solución mecánica de transporte vertical, teniendo en cuenta el alto número de padres y madres con bebés que allí habitan. Estos se veían obligados, a diario, a coger en brazos los carros y bajar escaleras -bien las del pasadizo de la estación de Renfe, o bien las de la calzada de San Ignacio- para salir de la plaza Larrerdi, donde se ubican sus viviendas.

Según confirmaron a este periódico ayer desde el departamento de Obras y Proyectos del Ayuntamiento de Donostia, la apertura del ascensor está pendiente sólo de un par de permisos que "ya están solicitados y se recibirán en breve" por parte de Industria y la compañía eléctrica Iberdrola. El ascensor, que ya funciona, no se abrirá al público hasta entonces, mientras que los escasos obreros que allí quedan se encargan estos días de rematar los últimos detalles de los acceso al elevador. El Consistorio, por su parte, da la obra por finalizada.

Esta actuación, incluida dentro del Fondo Estatal de Inversión Local para el Fomento del Empleo -también conocido como plan Zapatero-, ha costado 226.531 euros.

Las obras se iniciaron el pasado mes de junio y finalmente se han retrasado un poco más de lo previsto, apenas un mes. Obegisa se adjudicó la obra después de que el concurso planteado inicialmente fuese declarado desierto el 2 de abril de 2009 al no concurrir ningún licitador. Dicha situación forzó la apertura de un nuevo proceso que culminó el 17 de abril del pasado año, con la concesión a Obegisa.

Esta constructora ha empleado durante casi seis meses a nueve trabajadores en la construcción del ascensor, una escalera junto a la casa Beltran Enea y unos baños públicos que complementarán la renovada plaza de San Luis, en la que aún se están llevando actuaciones importantes, como la construcción de viviendas.

solución mecánica hasta el topo Este elevador conectará las 96 viviendas de Rutilita con la plaza de San Luis, donde, en el otro extremo, se sitúa otro ascensor inaugurado a comienzos del año pasado y permite ascender a la avenida del alcalde José Elósegui y la parada del Topo, tanto la futura como la provisional.

Además, la construcción del vial de Txingurri trajo consigo hace unos meses la renovación de las aceras del paseo de Herrera y la habilitación de un paso de cebra para cruzar a la estación de Renfe. Los vecinos de Rutilita han sufrido varias carencias de accesibilidad durante mucho tiempo.