- Juegan en casa, en el templo de Wembley, hoy en semifinales y el domingo en la final, si llegan. Casi toda la peña que se arremoline en el estadio londinense estará a favor, rugiente más que nunca, pues toda Inglaterra ha llegado al consenso, lo cual merece destacar con los tiempos que corren o hasta para justificar el brexit: ahora o nunca. Resulta que los inventores del fútbol andan hueros de triunfos. Ganaron, eso sí, el Mundial de 1966, que jugaron también en casa, y para de contar. Jamás la Eurocopa. Ni cuando la organizó en su territorio, en 1996. Llegó a semifinales, que es lo más lejos que ha conseguido en esta competición, junto a la de Italia 1968. Se toparon con Alemania, su habitual bestia negra, y adiós.

Por eso cuando en la ronda de octavos eliminaron al equipo germano con esa claridad (2-0) los pross reforzaron su convicción, como se demostró en el repaso que le dieron a Ucrania (4-0) en la ronda de cuartos.

Es ahora o nunca. No han encajado ni un gol, no conocen la derrota... y además tienen el beneplácito de las casas de apuestas, ajenas a fobias y filias, que ya estimaron antes de arrancar la competición que Inglaterra era la máxima favorita para ganar la Eurocopa, de tal forma que su victoria se pagaba 4/1, por delante de Francia (5/1), Bélgica (13/2) y España (7/1).

Ahora bien, cuidado con Dinamarca. Mucho se está recordando estos días la Eurocopa del 92, cuando Yugoslavia fue excluida por la UEFA del torneo a causa de la guerra de los Balcanes y repescó a los daneses. Sus jugadores, dispersos por el mundo en plan vacacional, se reunieron, se tomaron el asunto con filosofía y terminaron conquistando el torneo, derrotando a Alemania en la final, y sin el concurso de su máxima estrella, Michael Laudrup (aunque sí jugo Brian, el hermano, que estuvo genial).

Dinamarca, sobre todo está jugando bastante bien, y supieron sobreponerse con poderío al trauma que supuso el colapso de su mejor hombre, Christian Eriksen, en el primer partido de la fase de grupos frente a Finlandia, que aprovechó el desconcierto moral de los daneses para llevarse la victoria contra todo pronóstico. Su reacción posterior fue briosa, clasificándose segundo del grupo B para cruzarse con Países Bajos, a quien bajaron los humos, y luego derrotar a la República Checa, lo cual otorgó visado para Wembley, escenario de la fase final de esta convulsa Eurocopa.

Ya lo advierte su técnico, Kasper Hjulmand, un entusiasta del fútbol que practica la selección española. "Tenemos que aprovechar la presión que siente Inglaterra. Veremos un partido igualado", valoró el seleccionador danés, enfatizando que el apoyo que está recibiendo de todo su país da mucha "motivación" a su equipo.

Probablemente Hjulmand mantendrá en Wembley su sistema de cinco defensas, dos centrocampistas por delante y tres hombres de ataque. La vuelta al once del delantero del Leipzig Yussuf Poulsen, que ya disputó unos minutos contra la República Checa, puede ser la novedad de Hjulmand en detrimento de Kasper Dolberg. Mantendrá la zaga con Jens Stryger Larsen, del Udinese y Joakim Maehle, del Atalanta, en los laterales. El futbolista del Chelsea Andreas Christensen es el faro de la defensa junto al capitán y líder Simon Kjaer, exjugador del Sevilla, ahora del Milan. En el centro del campo, Mikkel Damsgaard ha ganado en relevancia tras la baja de Eriksen y ejerce de enganche entre el centro del campo con los puntas Poulsen y Martin Braithwaite.

Gareth Southgate dio con la tecla ante Alemania y después frente a Ucrania, remontando tras una fase de grupos en la que fue criticado por su falta de gol (solo dos en tres partidos) y racanería ofensiva. Todo eso acabó cuando en las eliminatorias de octavos y cuartos entraron en ebullición Sterling y Harry Keane. La defensa, ni tocar (ni un gol en contra, pese a dar sensación de pesada) y siempre queda el recurso de los jóvenes talentos (Mount, Sancho, Bellingham, Foden), y si no Rashford. Es ahora o...

Gareth Southgate. El seleccionador de Inglaterra asegura en vísperas del partido que su equipo tiene "mucha experiencia en estas situaciones" y que su preparación para el encuentro contra Dinamarca ha sido tranquila. "Estamos muy ilusionados por el partido porque sabemos que vamos a tener el apoyo de todo el país y esa es una sensación muy bonita", dijo Southgate en rueda de prensa. El entrenador inglés anunció que todos sus jugadores están disponibles para el partido.

Kasper Hjulmand. El entrenador de la selección danesa cree que su equipo tiene que "aprovechar" la presión que siente Inglaterra. El técnico del combinado escandinavo apuntó que una de las armas que tendrán sus hombres será jugar con la historia de Inglaterra, que en los últimos 30 años ha perdido todas las semifinales que ha disputado. "Tenemos que aprovechar la presión que siente Inglaterra", dijo.