Y de pronto, se desataron las especulaciones. ¿Regresará Serena Williams a las pistas de tenis? La pregunta tenía su base de fundamento. La estadounidense de 44 años se ha registrado en el sistema antidopaje de la la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA), el paso previo para poder competir, lo cual desató las preguntas. Ello acompañado de que Serena jamás pronunció la palabra “retirada” cuando abandonó la raqueta de en 2022 daba fundamento a un posible retorno a la actividad para concederse una nueva oportunidad.
Serena se reincorporó al sistema de la ITIA el pasado 6 de octubre. “Nos ha notificado que quiere estar de vuelta en el sistema. No sé si esto quiere decir que va a volver o si quiere darse esa oportunidad. Lo único que puedo decir es que está de vuelta en el sistema y tendrá que registrar sus localizaciones”, declaró el portavoz de la ITIA, Adrian Bassett, para la cabecera New York Times.
A efectos prácticos, este reingreso significaba que Serena podría volver a competir en abril de 2026, una vez cumplido el tiempo establecido entre la inscripción y el primer partido de competición. Sería la segunda vez que Serena retornaría al circuito profesional, ya que en 2018 desenfundó la raqueta después de haber dado a luz. En 2023, la extenista volvió a ser madre, después de colgar la raqueta en en 2022 tras conquistar 23 Grand Slams. La estadounidense se quedó a uno del récord que ostentan Margaret Court y Novak Djokovic, lo que podría haber sido una motivación para su retorno a la competición.
"Este alboroto es una locura"
Sin embargo, todas las especulaciones han quedado erradicadas en cuestión de horas, porque la propia Serena Williams se puso frente al teclado para desmentir su regreso a la competición. “¡Dios mío, no voy a volver! Este alboroto es una locura”, publicó en las redes sociales.
Una de las últimas apariciones públicas de la extenista fue el pasado octubre, cuando recibió en Oviedo el premio Princesa de Asturias de los Deportes 2025.
