En familia y con el corazón en un puño, en pareja, en equipo o encontrándose de forma accidental con un compañero de trabajo en pleno recorrido. La Behobia-San Sebastián alberga miles de historias en cada uno de sus corredores. NOTICIAS DE GIPUZKOA ha recuperado unas pocas:

Madre e hijo: debut inolvidable

Peru, oiartzuarra de 26 años, ha tenido el privilegio y la suerte de debutar en la Behobia junto a su ama, Agurtzane, una veterana que este mediodía, a sus 58 años, ha completado su decimoquinta Behobia (empezó a correr esta prueba con 42).

Han corrido en familia, en "homenaje a nuetra hermana que falleció el año pasado con 53 años", explica explica emocionada Agurtzane, que suelta por un momento el brazo de su hijo Peru y hace un gesto en forma de corazón con las dos manos hacia el cielo".

"La Behobia para mí es un clásico y esta es especial"

Agurtzane - Veterana corredora de Oiartzun

Abrazo de madre e hijo, orgullosos ambos, nada más cruzar la meta en 1h38. "Ahora llegan mi hermana Maitane y Anartz, mi cuñado", explica Agurtzane mientras esperan, no más de tres minutos, a sus familiares. "La Behobia para mí mí es un clásico y esta es especial".

Enamorados y mejorando

behobia san sebastian 09112025 foto pedro martinez Pedro Martinez

Abrazo y beso. Hay confianza. Felicidad compartida. "Somos pareja. De Donostia yo, y de Zizur ella". Habla Julen Egaña, un corredor de 34 años, orgulloso del trabajo realizado con su novia Irati, de 28 años, que ha hecho marca personal. 1h27. Su anterior registro era 1h30. Entre ambos suman 25 ediciones: 14 de Julen y 9 de Irati. Finos ambos.

"Hace cuatro o cinco años Irati vino a vivir a Donostia desde Navarra. Ella solía hacer la Behobia por su cuenta, y yo por la mía, y ya son cuatro o cinco años que la hacemos juntos. Cada vez mejor y mejor. Y el objetivo hoy era mejorar su marca, y lo hemos conseguido", explica Julen.

"Ella solía hacer la Behobia por su cuenta y yo por la mía. Entre los dos sumamos 25 y llevamos cuatro o cinco juntos"

Julen Egaña - Corredor donostiarra de 34 años

Le preguntamos directamente a ella: ¿Se puede mejorar esa 1h27? "No lo sé, quizás sí", cuenta ella, modesta. Julen lo tiene bastante más claro, porque el trabajo para la Behobia también lo hacen juntos y sabe que sí. Que pueden. Nos muestra el color de sus dorasles: "Hemos salido con el rojo, y la franja del amarillo está cerca, a partir de 1h25, que es una marca muy bonita".

Agroturismo en Segura y a correr

behobia san sebastian 09112025 foto pedro martinez Pedro Martinez

Planazo. Josep María, Miguel y Judith Arqué son de Badalona, del equipo Correr x correr. Para ella es la primera vez: tiene 30 años: "Lo tenía en la cabeza, porque correr la Behobia es un hito del grupo. La hacen cada año. Yo soy una incorporación medio nueva y este año me he sumado", explica feliz la corredora catalana.

"Venimos siempre en equipo desde Badalona y nos alojamos en un agroturismo de Segura, que nos guarda sitio"

Josep María - Atleta de 58 años de Badalona

Entre los tres suman 20 behobias. Josep María, de 58 años, suma trece; y Miguel, de 42 años, otras seis. "Somos un grupo grande y venimos siempre. Llevamos muchos años. Este año somos 25, y está corriendo con nosotros un atleta de 72 años, que aún está corriendo. Se llama Paco Vivo", cuenta Miguel: "El máximo que hemos llegado a venir hemos sido 31 personas".

Llegaron el jueves y se alojan donde siempre, en el agroturismo Ondarre de Segura. "Es una casa rural preciosa y todos los años nos guardan sitio. Compramos queso y venimos a Donostia", explica Josep María. El reloj marca un ritmo de 4:39 el kilómetro. 1h33, una buena marca para Judith, la feliz debutante.

Hasta en la sopa

behobia san sebastian 09112025 foto pedro martinez Pedro Martinez

Para Nerea , de 48 años, la de hoy ha sido su segunda Behobia. Ha salido con su hermana Koro, pero en el camino han incorporado a su equipo a su compañero de trabajo Jose, donostiarra de 53 años, que al final se ha fundido en un abrazo con su compañera. "Somos compañeros de trabajo y nos hemos encontrado en el camino". "A la altura de Jesuitas", ya en Donostia, y desde ahí hemos corrido juntos", asegura el donostiarra, que suma 13 behobias.

Jose (Donostia) y Nerea (Azpeitia): "Somos compañeros de trabajo y nos hemos encontrado en el camino"

Mientras Koro aún toma aire para la foto, Nerea explica que ha corrido "toda la vida", pero no se animó a hacer la Behobia hasta el año pasado, porque siempre le había "tenido miedo". Miedo que perdió en 2024 y le ha traído de nuevo a correr los 20 kilómetros que separan la muga de Behobia con el Boulevard en una jornada festiva.