La sexta etapa del Rally Dakar fue la soñada para el vigente campeón, el catarí Nasser Al-Attiyah (Toyota), que ya ve el camino despejado hacia su quinto título. A su victoria se sumó la pesadilla de Audi con el accidente que le costó el abandono al francés Stéphane Peterhansel –cuando mantenía un mano a mano con el jeque– y el choque que acabó con las opciones de Carlos Sainz, mientras que en motos se estrenó el argentino Luciano Benavides en un doblete de Husqvarna, con Joan Barreda (Honda), cuarto.

Los 358 kilómetros de especial entre Ha’il y Riad, que se redujo en unos 100 kilómetros –iba a ser la más larga–, dejaron el Touareg al alcance de la mano de Al-Attiyah. Solo él puede perderlo. Cuenta con más de una hora de ventaja (1h06:50) en la general sobre otro Toyota, el del sudafricano Henk Lategan. La marca japonesa copa las cuatro primeras posiciones. Tras Lategan están el brasileño Lucas Moraes a 1h13:19 y Giniel de Villiers, este ya a 1h44:38. A dos minutos del cuarto Toyota se sitúa el Audi de Mattias Ekstrom.

El vigente campeón abría pista tras su victoria el jueves, pero no le perturbó. Dominó los primeros 31 kilómetros. Era ya una declaración de intenciones. Monsieur Dakar le quitó la primera posición al paso por el kilómetro 84, Sainz igualó al catarí. Parecía que había batalla. El Matador empezó a ceder tiempo y el francés apretó cuando la etapa ya había superado el ecuador. Tenía entonces 1:24 sobre Al-Attiyah y 3:01 respecto a Sainz. Loeb perdía 1:01 con el madrileño y el saudí Yazeed Al Rajhi (Toyota) se aferraba al podio, a 24 segundos de su compañero de marca.

A partir de ahí, todos los contratiempos posibles y un gran beneficiado: Al-Attiyah. Al accidente que le costó el abandono a Peterhansel –Edouard Boulanger, su copiloto, sufría dolores en la espalda y fue trasladado en helicóptero hasta el hospital de Buraydah para realizarle pruebas complementarias– se sumó el de Sainz, ambos hacia el kilómetro 212, con apenas 100 metros entre uno y otro. Cuatro kilómetros más adelante, Al Rajhi se detuvo con un problema mecánico. La etapa y el Dakar se le despejaban al campeón. Tras haber abierto toda la etapa, regulando en los últimos kilómetros, le metió 3:29 a Loeb, 8:52 al sudafricano Henk Lategan (Toyota) y 9:12 a Chicherit en una etapa que le salió redonda ya que ahora dispone de 1h06:50 de ventaja en la general.

Alternativas en motos

Después de la prólogo y seis etapas, nadie ha repetido victoria en motos. La sexta se la anotó Luciano Benavides, aunque inicialmente la organización había dado como vencedor al estadounidense Skyler Howes, quien reforzó su liderato en la general con su segunda posición. Doblete de Husqvarna.

En la meta, el sudamericano aventajó en 1:03 a Howes, quien cuenta con 3:32 de renta en la general sobre el australiano Toby Price (KTM), tercero en la etapa tras haberse beneficiado de una bonificación de 1:36 por abrir pista. A poco más de 50 kilómetros de meta, la victoria estaba muy reñida. Howes se mantenía al frente con 16 segundos respecto a Price, 25 respecto a Cornejo y 40 sobre el argentino Luciano Benavides.

El argentino mejoró el tiempo de su compañero en la meta, aunque inicialmente le habían dado el triunfo a Howes, que igualmente consolidó su liderato.

Joan Barreda, pese a correr con un dedo roto desde la tercera etapa y caerse en la quinta, acabó cuarto a solo 2:33 (está a 10:54 en la general).