Brais Méndez ya está en Donostia. El segundo fichaje de la Real para la próxima temporada llegó esta mañana sin tiempo que perder para ser uno más en el primer entrenamiento de Imanol Alguacil de este jueves en Anoeta. 

El club realista hizo oficial en la tarde de hoy el fichaje del jugador gallego, que llega por una cantidad fija de 14 millones de euros y un contrato hasta 2028. Julen Lobete tiene que concretar si finalmente accede a entrar en la operación y se marcha a Vigo, incluso con una oferta de renovación de la Real sobre la mesa.

El delantero era la llave y el motivo del retraso del viaje a Donostia de Brais, después de que ambos clubes hubiesen alcanzado un principio de acuerdo el pasado viernes.

El centrocampista aterrizó cerca de las 10.30 horas en Loiu y se subió un coche enviado por la Real. Pasadas las 12.30 horas se presentó en el Hotel Costa Vasca, donde le aguardaban Roberto Olabe, Erik Bretos y el vicepresidente Ángel Oyarzun con los que estuvo charlando en la zona de la cafetería.

Brais se mostró muy contento por su fichaje y no dudó en posar con los niños que estaban presentes y que le pidieron, algunos con más vergüenza que otros, una fotografía. Más inadvertido pasó para algún equipo extranjero que compite en la Donosti Cup. 

Después de instalarse y sin apenas tiempo para descansar, Olabe y Bretos le llevaron a la Policlínica donde pasó la pertinente revisión médica, requisito de obligado cumplimiento para firmar su nuevo contrato que se espera haga en las próximas horas. Como se puede comprobar en las imágenes, el de Mos entró en el edificio con un rictus muy serio, un look de jugador de baloncesto de NBA y unas zapatillas en la mano para completar los test físicos. Los que le vieron de cerca destacaron que “era más alto” de los que se pensaban o habían visto en fotografías. El horario de su presentación oficial todavía no se ha concretado, aunque su fichaje ha despertado una importante expectación en la parroquia realista, que espera que se convierta en un refuerzo diferencial con un amplio margen de mejora.

Méndez dijo estar “muy contento, muy ilusionado y muy agradecido por la confianza que han depositado en mí. Espero devolverla cuanto antes para que se vea recompensado ese esfuerzo. Sobre todo, estoy con ganas de empezar”. 

El que vivió su primera jornada como nuevo jugador txuri-urdi, este de forma oficial, es Mohamed Ali Cho. O mejor dicho, Momo Cho, como se ha presentado y como ya le llaman todos en Zubieta. Después de dar una vuelta y conocer de primera mano la ciudad el martes por la tarde junto a Olabe, Bretos y su familia (se aloja en un piso, no está en un hotel), el galo se presentó a primera hora de la mañana en las instalaciones realistas para completar su primera sesión de trabajo de cara a aclimatarse para el inicio de la pretemporada de hoy. Como si fuese su primer día en el colegio, le enseñaron las salas más importantes, como la cocina y el comedor, donde coincidió con los realistas que llevan completando el stage previo. 

Con Ander Barrenetxea se topó justo cuando se bajó del coche y con Mikel Oyarzabal, en un encuentro muy especial como se pudo apreciar en la cara del nuevo realista, se topó en el interior del edificio Gainditu. El capitán le dio la bienvenida y le deseó la mejor de las suertes. El internacional sub’21 por su país se mostró tímido y reservado, aunque no escatimó sonrisas ni con sus compañeros ni cuando saludó al cuerpo técnico encabezado por Imanol Alguacil y Mikel Labaka, con los que la comunicación se supone que será más fluida a medida que se vaya adaptando y conociendo poco a poco el idioma.

A diferencia del resto de los realistas, Cho no tuvo que pasar ningún revisión médica porque, como recordarán, ya la superó antes de firmar su contrato en un examen realizado en tierras francesas y supervisado por los galenos blanquiazules. Por lo tanto ayer, se vistió de corto y se puso manos a la obra con los estiramientos y el trabajo en el gimnasio con el objetivo de llegar con el cuerpo preparado para las primeras palizas físicas que le aguardan. 

Cho se perfila como la nota exótica en este inicio de temporada ya que para la gran mayoría es un auténtico desconocido. Eso sí, al igual que sucede con Brais y su polivalencia que le permite desenvolverse con garantías en muchos puestos de los esquemas de Imanol Alguacil, en la entidad donostiarra tienen depositadas muchísimas esperanzas en este joven francés del que cuentan que es capaz de reventar defensas a “campo abierto” y que, dada su juventud, también cuenta con un abismal margen de progreso. 

Cho será presentado el viernes a las 13.00 horas en Anoeta, también con entrada libre para los aficionados interesados en acercarse.