Arria V ya es leyenda. El errezildarra quiso poner fin su trayectoria deportiva este domingo con una desafío de máxima exigencia. Arria realizó diez alzadas a un cilindro antiguo de 100 kilos en Ibarra, completó una carrera de montaña de 43 kilómetros por los montes que rodean Tolosa y, de regreso a Ibarra, cortó diez kanaerdikos en un tiempo total de seis horas, cinco minutos y 52 segundos. El aizkolari no pudo cumplir su objetivo de terminar estas tareas por debajo de las seis horas, pero finalizó satisfecho con su trabajo y dejó para la historia una marca espectacular y un ejemplo de por qué el reto es la esencia de los herri kirolak.