Juanito Oiarzabal, primer vasco en coronar los catorce ochomiles, vivió una de las situaciones más límites de su carrera deportiva en 2004 en el K2 (8.611 metros). El gasteiztarra alcanzó la cima con Juan Vallejo y Edurne Pasaban.
Cerca de la cumbre, sufrió un edema pulmonar y se perdió en el descenso, que también fue complicado para sus compañeros de cordada.
Por suerte, Ferrán Latorre se lo encontró inconsciente en un ventisquero no muy lejos del Campo 4. Después de inyectarle antibióticos para combatir las congelaciones, Juanito recibió ayuda en el descenso. El alavés perdió todos los dedos de los pies y la tolosarra, que fue capaz de bajar por su cuenta, dos.
El programa 'Al Filo de lo Imposible' contó el complicado descenso de Juanito y Edurne Pasaban.