donostia - Kenny Chery fue designado como el MVP (mejor jugador) de la 18ª jornada en la Liga ACB, un reconocimiento a su exhibición contra el Betis (24 puntos con un espectacular 13/13 en tiros libres) y también a su progresión en las últimas jornadas, en las que ha mejorado el rendimiento que mostró en las semanas iniciales del curso.
El base canadiense se perdió por lesión los dos primeros partidos y hasta la jornada 12 alternó buenas actuaciones con otras más flojas. Esta irregularidad y su condición de extracomunitario -aún no ha podido sacarse el pasaporte de Haití, que lo convertiría en cotonou y no ocuparía plaza de extranjero- hicieron que su continuidad en el GBC estuviera en el aire, tal y como reconocía abiertamente Porfi Fisac.
Sin embargo, a raíz de la visita al Burgos, el nivel de Chery, que mañana cumple 26 años, ha subido notablemente. Ante el conjunto burgalés metió 17 puntos, cifra a la que dio continuidad con catorce contra el Barcelona, siete ante el Tenerife, 18 frente al Real Madrid y 24 este pasado domingo en Sevilla. Es decir, en sus últimas cinco apariciones -no pudo jugar ante el Obradoiro por molestias en la espalda-, su media ha sido de 16 puntos, convirtiéndose en el referente anotador del GBC.
“Me siento genial, realmente feliz. Esto ha sido posible gracias, en primer lugar, a Dios y, segundo, a mis compañeros y al cuerpo técnico. Todos juntos trabajamos duro para alcanzar este nivel”, comentaba ayer un satisfecho Chery.
